Anticipan migración masiva de compañías en P.R. por reforma contributiva federal
De aprobarse la reforma contributiva federal tal como está acordada en comite de conferencias en el Congreso supone un golpe mortal para la manufactura y la industria farmaceutica de Puerto Rico ya que pone en riesgo los cerca de 150 mil empleos indirectos que dependen de este sector.
Elizabeth Plaza, presidenta Pharmabioserv anticipó que nuestra estructura contributiva pone en desventaja competitiva a Puerto Rico lo que provocará que las compañías ponderen mudar sus operaciones a otros estados que le pueden otorgar más y mejores beneficios contributivos.
'Es un golpe mortal para nosotros, los que dependemos de esta industria porque para estas multinacionales entrar, cuando lo miran de una perspectiva global, Puerto Rico es simplemente un componente dentro esto. No sabemos que va a pasar a corto o mediano plazo, pero ciertamente cuando ellos evalúen sus alternativas, de donde deben tener ellos sus lugares de manufactura', acotó Plaza.
Pharmabioserv es una empresa que desde hace 25 años ofrece servicio directo a la industria farmaceutica principalmente a las compañías de ciencias vivas que manufactura productos en Puerto Rico y en otros países
'Nosotros estamos bien preocupados. A largo plazo ciertamente nos preocupa. La industria farmaceutica genera aproximadamente 78,000 empleos directos y alrededor 150,000 empleos indirectos. Si en efecto se aprueba como está, Puerto Rico deja de tener ventaja competitiva en comparación con los otros 50 estados.
Dijo que los costos de electricidad en Puerto Rico son más altos y aunque aquí hay una mano de obra sumamente adiestrada en las regulaciones y requerimientos de la industria farmaceutica, eso no impide que otros estados puedan desarrollar esa misma mano de obra en sus jurisdicciones o llevarse a los boricuas que ya laboran a las compañías establecidas en la Isla.
Plaza sostuvo además queya otros estados com Florida han comenzado a emular legislación similar a la de Puerto Rico para ofrecer incentivos contributivos y crear empleos atrayendo estas industrias. Por esta razón, Plaza considera que es muy poco lo que podría hacer el gobierno local para evitar que se marchen las industrias farmaceuticas que ya están en Puerto Rico.
En esa línea, Plaza anticipó que la reforma contributiva federal abonará a un aumento en el exodo de profesionales de la isla que son bienvenidos en otros estados dónde hay manufactura.
'Nos pone en desventaja. Entendemos que cuando estas industrias se establezcan en otros estados, los empleos se van a perder en Puerto Rico. Los hemos estado perdiendo y esto va a provocar que despues de María ya sean ido muchos, la otra avalancha será la salida de profesionales que se van a ir con sus compañías', advirtió.
Por su parte, Rodrigo Masses que preside de la Asociación de Industriales coincidió con Plaza en el efecto devastador que tendrá para la economía los cambios a la estructura contributiva por la situación por la que ya atraviesa la isla.
'Si en efecto ese no incluye lo que tenia que incluir para eximir a Puerto Rico, en la medida que afecta dramáticamente el posicionamiento y desarrollo económico de la isla, es ciertamente es un golpe fuerte a la economía y a la capacidad de Puerto Rico para recuperarse', señaló el líder del sector industrial.
De acuerdo con Masses, resulta difícil de creer la determinación tomada por el Congreso porque el presidente del Comite de Finanzas en el Senado de EEUU, Orrin Hatch conoce la situación fiscal y económica de la isla ya que presidió el comite de trabajo para la recuperación económica de Puerto Rico creado bajo la ley Promesa, que hoy cobina la Junta de Control Fiscal (JCF), mecanismo encargado de fiscalizar las finanzas públicas en la isla.
Incluso, Masses se mostró sorprendido con el acuerdo congresional, que establece que la isla será tratada como un territorio extranjero con 12.5% de arancel, ya que hasta anoche la información que les llegaba desde Washington es que todo estaba resuelto, por lo que entendían que Puerto Rico iba a ser atendido adecuadamente en la reforma contributiva estadounidense.
'Si Hatch fue el muro de contención de nuestras expectativas, esto es inconcebible. Él conoce a Puerto Rico. Está al tanto de todo lo que nos está afectando', puntualizó al criticar además la inacción del senador republicano por La Florida, Marco Rubio.
Masses apuesta a que Puerto Rico pueda tener una segunda oportunidad para enmendar la medida. De igual forma, cada compañía deberá comenzar un proceso de evaluación del impacto de los cambios contributivos aprobados para determinar si se quedan o se van de la isla.
'En la matemática de cada una evaluarán si se mantienen o no', terminó diciendo.