Durante el día de hoy un jurado compuesto por 8 hombres y 4 mujeres decidirán si condenan o no a la pena de muerte a Edison Burgos Montes, convicto por narcotráfico y por asesinar y desaparecer a Madelyn Semidey Morales, una informante de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en ingles).

Se espera que a partir de las 10:00 a.m. el juez federal Jay García Gregory escuche los argumentos finales de la Fiscalía y la Defensa, para luego impartir al jurado las instrucciones y estos se vayan a deliberar.

Su determinación no sólo pudiera cambiar la vida de Burgos Montes y sus familiares, sino que podría convertirse en el primer caso de pena de muerte en Puerto Rico.

En el pasado se han presentado cerca de tres casos donde no hubo un veredicto de pena de muerte. El primer caso fue el de Héctor Acosta Martínez y Joel Rivera Alejandro, que enfrentaron un proceso judicial por supuestamente matar a un comerciante en el 1998, y un jurado lo absolvió.

El segundo caso fue el de Lorenzo Catalán Román y Hernaldo Medina Villegas, acusados de matar en el 2002 a un guardia de seguridad de la empresa Ranger American Armored Services.

El tercer caso es el de Carlos Ayala López, acusado asesinato de un guardia federal en el 2002.

Varios expertos como el licenciado Osvaldo Burgos, presidente de la Comisión de Derechos Humanos y Constitucionales del Colegio de Abogados, aguardan sus esperanzas de que este no sea el desenlace de los procedimientos judiciales que se siguen contra Burgos Montes para determinar si enfrenta la pena de muerte o cadena perpetua. A su juicio, del jurado llegar a este veredicto, se establecería 'un precedente nefasto'.

Si el jurado condena a Burgos Montes a la pena de muerte, el licenciado manifestó a NotiCel que este es un proceso que pudiera durar años hasta que se lleve a cabo la ejecución. Indicó que en el promedio de los casos de pena de muerte transcurren 9 años hasta que concreta la ejecución.

Ante esto, opinó que la pena de muerte, 'es un proceso medio tortuoso para la persona'.

Para Burgos, la defensa de Burgos Montes, el licenciado StevenPotolsky y la licenciada Rachel Brill, podría apelar dicho veredicto basándose en varios criterios: la validez de la prueba sometida para demostrar su culpabilidad o el estado de derecho para establecer la constitucionalidad de la pena.

Aunque la Constitución de Puerto Rico no avala la pena de muerte, la Constitución de Estados Unidos, que tiene jurisdicción en la isla, sí lo aprueba.

Burgos reiteró que los mecanismos de la Defensa para apelar si es un veredicto desfavorable para Burgos Montes, es primero yendo al Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito de Boston, lo que pudiera llegar hasta el Tribunal Supremo de los Estados Unidos.

'Siempre está la posibilidad del indulto presidencial o la conmutación de la pena (a cadena perpetua)', abundó.

Si pasando todos estos canales prevalece la condena de pena de muerte para Burgos Montes, la misma se efectuaría en el estado de Indiana en la prisión de Terre Haute, también conocida como el 'Corredor de la Muerte'. El método aplicado para la ejecución es la inyección letal.

De otro lado, el licenciado Edgardo Román, coordinador general de la Coalición Puertorriqueña Contra la Pena de Muerte, precisó a este medio digital, que de acuerdo a la información que se tiene, al momento hay otros dos casos que el Departamento de Justicia Federal certificó que le aplicaría la pena de muerte, y que los procedimientos judiciales para determinar si se efectúa o no, comienzan el próximo enero.

Uno de ellos es el del jamaiquino Lashaun Casey, quién fue acusado de asesinar a Jesús Lizardi Espada, un agente encubierto de la Policía de Puerto Rico. Según la acusación Casey lo asesinó en agosto del 2005 mientras se suponía harían una transacción de droga en Culebra, y en donde además le hizo un carjacking. El cuerpo de Lizardi Espada fue encontrado días después en Luquillo.

Asimismo, está el caso de Alexis Candelario Santana, presunto autor de la Masacre de La Tómbola, que ocurrió en octubre del 2009 en Toa Baja. A este se le imputa haber cometido 21 asesinatos, 8 de estos en La Tómbola.

Pero aparte de estos tres casos, Román expuso que hay al menos 16 casos en espera de que el secretario del Departamento de Justicia Federal, Eric Holder, determine si cualifican para la pena de muerte.

De acuerdo al pliego acusatorio, Burgos Montes mató y desapareció en el 2005 a su novia,SemideyMorales, y su cuerpo aún no ha sido encontrado. Está tenía tres hijas al momento de que fue asesinada.

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