Tras serias alegaciones e hilos de comunicaciones que han surgido en las redes sociales.

La cadena de tiendas de ropa playera Kókomo anunció, en sus redes sociales, que terminarán "toda relación comercial" con Julius Ortiz, dueño y distribuidor de la marca de trajes de baño Pauwii Swimwear, y señalado por varias jóvenes en las redes sociales como agresor en un patrón de acoso y violencia sexual que ha incluido no solo a Ortiz, sino a dueños de otras empresas locales.

"La familia Kókomo las valora y se solidariza con todas ustedes", expresó la cadena en su perfil de Facebook.

Este fin de semana se dieron a conocer en las redes sociales decenas de hilos de alarmantes comunicaciones en los que varios comerciantes locales eran señalados por proponer a jóvenes y menores de edad desde sesiones de fotos promocionales para su marca hasta ser "sugar babies", implicando intercambios de índole sexual a cambio de beneficios.

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Otro de estos individuos fue identificado por las denunciantes como "Javier", y en las redes lo ubican como el dueño de la compañía Yatea.

A Ortiz, particularmente, le imputan en las redes sociales haber sacado fotos sin consentimiento a menores de edad y hasta haberlas tocado con el pretexto de medirles trajes de baño.

Al dueño de Yatea le señalan, entre otras cosas, haberse acercado a las denunciantes para comentarles sobre la oportunidad de que estas aparecieran en fotos de tipo "party, bebidas, playa, música, sexy fun", algunas siendo menores de edad.

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Ante las denuncias, tanto la gobernadora Wanda Vázquez, como el Departamento de Justicia y la Oficina de la Procuradora de la Mujer (OPM) han solicitado se radiquen querellas formales para continuar las investigaciones, que serían llevadas a foros federales por tratarse de crímenes sexuales contra menores de edad.