Moca - Resignados y confiando en un plan divino, la familia de Myrta Lassalle expresó su dolor ante la repentina muerte de la menor de diez hermanos nacidos y criados en el pueblo de Moca, a causa de las heridas recibidas tras un descarrilamiento de tren en Santiago de Compostela, España.

Rosa Lassalle, portavoz de la familia y hermana de Myrta, recibió en horas de la mañana de hoy domingo la terrible noticia del fallecimiento. 'Ha sido algo horrible. Las dos hijas habían viajado a España y estuvieron con Myrta mientras estuvo en el hospital, pero lamentablemente falleció'.

Myrta Lassalle se encontraba en España disfrutando un viaje de segunda luna de miel con su esposo, Roberto 'Bobby'Fariza, luego de asistir a la boda de una de sus hijas en Italia. Esperaba en ese viaje poder ver de primera mano las fiestas en honor al Apóstol Santiago El Mayor y el peregrinaje tradicional del Camino de Santiago de Compostela.

Según relataron los familiares, en los instantes justo después del accidente, el esposo perdió momentáneamente el contacto con ella. 'Myrta se le perdió y al encontrarla, ella le dijo ‘Abrázame, Bobby'' Esas fueron las últimas palabras de la mocana, quien sufrió severas heridas en la cabeza que incluso le ocasionaron desprendimiento de parte del cuero cabelludo. 'Estaba toda ensangrentada, el cantazo fue fuerte de verdad,' dijo Rosa. 'Bobby está mejor físicamente, sufrió golpes y tiene dificultad para caminar pero no se ha quejado de nada atendiendo a su esposa'.

Rosa Lassalle indicó que el esposo y las hijas de la boricua fallecida realizan las gestiones para poder trasladar el cuerpo directamente a Houston, Texas y darle sepultura donde están ellos domiciliados. 'Las tres hijas y su esposo viven allá, no la van a traer a Puerto Rico. Ellas nacieron allá'.

En un mensaje en Facebook, la familia inmediata de la mujer dijo que 'Myrta era nuestra amada esposa, madre, hermana, suegra, tía, y amiga y las palabras no pueden expresar nuestro sentido de pérdida. Para todos los que la conocieron, Myrta ofreció amor irremplazable, compasión, valor, amistad, y apoyo. La vamos a extrañar mucho'.

La pérdida de Myrta deja un vacío irreemplazable en esta familia de Moca, pues al ser la menor de los hermanos, mantenía siempre lazos de comunicación entre todos.

'Myrta terminó de estudiar en el Colegio de Agricultura de Mayagüez trabajo social y se fue a vivir a Texas después que se casó'. El matrimonio de Myrta Lassalle con Bobby Fariza, quien también es oriundo de Moca, había durado 34 años al momento de su muerte. Myrta, quien tenía 59 años, esperaba regresar el 6 de agosto al lugar donde laboraba como oficial de probatoria en Texas, una profesión que mostraba su entrega a una vocación de servicio.

'Era una persona jovial, pro familia, era la tía que siempre estaba preocupada por sus sobrinos. Era la querendona que siempre estaba pendiente de todos nosotros, constantemente nos estaba llamando. Planificaba fiestas y siempre estaba viniendo a Puerto Rico'. Su hermana la describió como una persona sumamente orgullosa de su puertorriqueñidad y arraigada a su fe cristiana. 'Era una boricua de verdad, donde quiera hablaba de su pueblo de Moca'.

La penúltima visita de Myrta Lassalle a su amada Isla fue el pasado mes de mayo con motivo de una fiesta que su sobrina le planificó. Luego la tragedia comenzó a tocar la puerta de la familia Lassalle, primero con el fallecimiento a principios del mes de julio de una hermana de Myrta a causa de un infarto cardiaco. Myrta Lassalle asistió al sepelio de su hermana y luego inició su fatídico viaje de vacaciones a Europa. Poco se imaginó esta familia que en menos de un mes, la muerte les arrebataría a otra miembro de la familia de manera igualmente inesperada.

Sobre las circunstancias que rodean el accidente que provocó la muerte de Myrta Lassalle, los familiares se mostraron resignados. 'Es algo increíble, ese chofer fue bien negligente. De verdad que falló, hay tantas y tantas versiones que al uno no estar allá, no sabe y no podemos culpar. Es un ser humano también y no sabemos la razón de él para guiar a exceso de velocidad, quizás lo presionaron. No podemos prejuiciar a nadie. Si Cristo perdonó, por qué nosotros no podemos perdonar?,' lamentó Lassalle. La portavoz de la familia delegó en el esposo de la infortunada cualquier acción legal que en su momento pueda surgir por causa del accidente.

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