Clásico Mundial: Quisqueyanos y boricuas se disfrutan la rivalidad
El esperado duelo caribeño entre las novenas de Puerto Rico y la República Dominicana no será un duelo de exhibición y mucho menos un partido amistoso entre dos equipos que ya aseguraron su pase a la segunda ronda del Clásico Mundial de Beisbol, edición 2013.
Mientras Quisqueya desea consolidar su reinado de béisbol en el Caribe, Borinquen quiere proteger su invicto en casa, desde que comenzaron el Clásico en el 2006.
Al menos así piensan sus respectivos fanáticos, quienes entienden que el juego del domingo es uno de honor entre dos equipos que por décadas han protagonizado una de las rivalidades más grandes en el deporte del béisbol.
Cuando el reloj marque las 7:30pm (hora del Atlántico) y se lance la primera bola en el Estadio Hiram Bithorm de San Juan, otra página del deporte antillano se estará escribiendo de la mano de dos naciones hermanas en solidaridad, pero rivales cada vez que se encuentran en el terreno deportivo.
De hermandad y rivalidad, de eso trata el importante choque que cierra la primera ronda del Grupo C en el Clásico.
NotiCel conversó con fanáticos de ambos países, mientras éstos esperaban que abrieran las puertas del Estadio Hiram Bithorm.
Todos coincidieron en que era necesario ganar el choque dominical y terminar la primera ronda con solidez y optimismo.
'Este juego es más importante que cualquier otro de esta primera ronda. No importa si ambos equipos están clasificados a la segunda en Miami. Por la gran rivalidad, este juego es más importante que cualquier otro. Mucha gente espera este Clásico solamente por venir a este juego. Mira a tu alrededor, la gente está motivada y todos los boletos fueron vendidos', expresó Eddie González, quien es dominicano residente en Santurce, Puerto Rico.
Al igual que González, su compatriota, Wellington Díaz, reconoció la importancia del juego en términos de lo que su resultado pueda provocar en el ánimo de los equipos.
'Voy a los míos y tenemos el material para ganarle a Puerto Rico. Somos países hermanos, pero no podemos negar la gran rivalidad que tenemos con los boricuas en el deporte', comentó Díaz, quien reside en el estado de Nueva York.
Por su parte, los puertorriqueños defienden su equipo a capa y espada e igualmente reconocen la importancia de defender su casa, antes de partir a Miami para la segunda ronda.
Puerto Rico nunca ha perdido en el Bithorm desde que inició el Clásico en el 2006.
'Hay que ganar y defender nuestro invicto en este parque. No hay duda de que República Dominicana tiene los mejores jugadores, peor si ganamos, vamos a aumentar nuestro optimismo y los equipos de la segunda ronda nos van a respetar más', argumentó Kemil Colón, quien vino a San Juan desde su natal, Santa Isabel.
Junto a Colón, su amigo Rolando Villaronga celebró el hecho de que, luego de tantas décadas, la rivalidad entre Puerto Rico y República Dominicana aún siga viva.
'Esta rivalidad siempre ha sido fuerte y máxime si juegan en Puerto Rico. Por el hecho de que en la Isla viven muchos dominicanos, el parque estará dividido en términos de lealtades. Va a ser emocionante', declaró Villaronga.
Pendientes a NotiCel para la cobertura del histórico partido entre estas dos novenas antillanas.