Cierre de negocios por órdenes ejecutivas de covid-19 provocan pérdidas por más de $27,000 millones
El estudio estimó, además, una reducción de más de 100,000 puestos de trabajo.
El prolongado cierre y la reducción en operaciones de los negocios dispuesto por las distintas órdenes ejecutivas emitidas para combatir la pandemia de covid-19, produjeron ya pérdidas por más de $27,000 millones por reducción en ventas y producción, de acuerdo con estimados de la Junta de Planificación (JP).
La conclusión es parte de un análisis que incluyó la JP en el Informe Económico al Gobernador para el año fiscal 2020 y que comenzó a circular ayer lunes. El total incluye también el impacto de los cierres durante los primeros meses del presente año fiscal 2021, que comenzó en junio de 2020.
“Las medidas decretadas a partir del 15 de marzo de 2020 para contener la propagación del covid-19 afectaron la producción económica, el mercado de trabajo y la demanda en la mayoría de los sectores industriales en Puerto Rico”, se afirma.
Sostienen, sin embargo, que el flujo de dinero proveniente de los paquetes de ayudas aprobados por el Congreso de los Estados Unidos y Gobierno de Puerto Rico ha representado un elemento amortiguador.
“En resumen, en el año fiscal 2020 el estimado total de reducción en las ventas (producción industrial) fue $14,995.4 millones para todos los sectores”, dice el citado documento.
Agrega que Igualmente, en los meses transcurridos del año fiscal 2021, la baja en la producción se estimó en $12,336.6 millones. Esto incluye el impacto directo e indirecto.
Según los estimados de la JP, los sectores más afectados por estos cierres fueron en el año fiscal 2020 los servicios (incluyendo comercio), que representó el 58.5% ($8,773.6 millones) del total; seguido de manufactura con el 29.5%. Las pérdidas específicas en ventas del comercio las estimaron en $1,794.1 millones, mientras que los sectores de agricultura, construcción y minería se impactaron en $68.7 y $862.8 millones, respectivamente.
El mismo ejercicio para los mencionados primeros meses del fiscal 2021 resulta en las mismas conclusiones, de que los sectores más afectados son los servicios (incluido comercio) y la manufactura con pérdidas en ventas de $6,987.8 millones y $3,082.6 millones, respectivamente.
Estos estimados toman en consideración 16 “fases” u órdenes ejecutivas, comenzando con la primera que fue por solo 16 días y que cubrió el período de 15 al 30 de marzo de 2020. Esta, se indica, “afectó la demanda final en $1,943.3 millones”.
La Fase 16, la última que incluye este análisis, cubrió 28 días, desde el 15 de marzo al 11 de abril de 2021. El impacto de esta orden fue menor debido a que se habían levantado la mayoría de las limitaciones en la operación de negocios. Se estimó su efecto en la demanda final en $474.1 millones.
El escrito aclara que la pequeña diferencia en los impactos estimados para el año fiscal 2020 y lo transcurrido del presente año fiscal se debe a la cantidad de días transcurridos este año bajo las ordenes ejecutivas, que son 285, comparado con los 108 días en el fiscal 2020.
Este documento evalúa también el impacto en el empleo, y concluye que este “pudo haberse reducido en 101,935 puestos de trabajo. Igualmente, el sector de servicios fue el más afectado con una baja de 58,148 empleos, incluyendo comercio. El ingreso salarial de los trabajadores se redujo en aproximadamente $2,003.8 millones”, indica refiriéndose al fiscal 2020.
El impacto directo e indirecto en el empleo e ingresos salarial para la porción del fiscal 2021 evaluada totalizó 103,017 y $2,165.3 millones, respectivamente.
El alivio de las "ayudas"
Como contraparte a las fuertes pérdidas económicas señaladas, el análisis resalta que “los estímulos aprobados para contener la pandemia tanto estatal como federal, que ronda los $20,000 millones, son cifras que de usarse en su totalidad tendrán un impacto significativo. Esto contribuiría grandemente a contrarrestar las pérdidas económicas provocadas por las medidas tomadas para atacar la pandemia”, señalan.
Los estímulos a los que se refieren incluyen el paquete de asistencia directa a trabajadores y empresas que autorizó el gobierno de Puerto Rico el 23 de marzo de 2020 y que ascendió aproximadamente a $787 millones.
En torno a las aportaciones federales señalan que según el Plan Fiscal del Gobierno, el estimado del estímulo federal de la Ley Cares es de $14,686.0 millones, sin incluir el estímulo firmado por el Presidente, Joe Biden. Agregan que en la página de la Comisionada Residente, Jenniffer González, se indica que al 15 de marzo de 2021 la cantidad de dinero asignada a Puerto Rico es de $17,570.3 millones y asumen que eso incluye todos los fondos.
Dicen además que “en el portal de la Committee for a Responsible Federal Budget" se indica que hasta el 15 de marzo de 2021, el montó comprometido y desembolsado son $18,924.7 millones. De esta cantidad, aproximadamente el 79.0 por ciento son ayudas y el restante programas de préstamos y subvenciones”.
Afirman que “el Modelo de Insumo-Producto estima que estos estímulos pudieran tener un impacto en el Producto Bruto, por cada $500 millones de 0.5% por ciento con el estímulo local. Esto, añaden, contribuiría a contrarrestar el impacto de las órdenes ejecutivas”. Explican que este Modelo de Insumo-Producto se utiliza para medir el impacto que tendría alguna medida de política pública sobre la economía.
Se reconoce, por otro lado,que la economía está dando señales de recuperación en meses recientes, pero se advierte que las medidas implementadas para combatir el COVID-19 puede que impacten en tiempo y espacio la actividad económica, de manera que es necesario la intervención del gobierno para asistir a las industrias afectadas ya sea por medio de incentivos, subsidios y/o ayudas económicas.
Este Informe Económico al Gobernador para el año fiscal 2020 concluye que en dicho periodo la economía de Puerto Rico, medida a través del Producto Bruto a precios constantes (1954-eliminando el efecto inflacionario), se redujo 3.2% al compararse con el 2019. Este resultado,indican, fue producto del desempeño negativo en el gasto de consumo personal, (-9.4%); la inversión en construcción, (-37.3%); la inversión en maquinaria y equipo, (-14.4%); y los gastos de consumo del gobierno, (-0.3%).