La medida debe volver a la Cámara de Representantes federal para que se confirmen las enmiendas realizadas por el Senado.

El Senado federal aprobó hoy, viernes, el nuevo proyecto de estímulo económico por 1.9 billones de dólares que incluye, entre otras cosas, cheques directos de $1,400 para los ciudadanos estadounidenses que ganen $75,000 o menos.

La medida pasa ahora a la Cámara de Representantes para que se aprueben las enmiendas realizadas por el Senado. De ser aprobada en la Cámara baja, pasaría a la Casa Blanca a la espera de la firma del presidente, Joe Biden, para convertirse en ley.

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Esta medida tuvo cerca de 12 horas de debate en el Senado federal, donde habían diferencias entre congresistas respecto a las partidas presupuestarias que debía incluir. Los demócratas estaban preocupados porque, con una mayoría de solo un voto en ese cuerpo, cualquier disyuntiva podía llevar a que el proyecto no fuera aprobado. Para lograr la aprobación uno de los cambios principales -que ahora deberá ratificar la Cámara federal- se rebajó de 400 a 300 dólares semanales el subsidio de desempleo, que regirá hasta el 6 de septiembre, en lugar del 30 de ese mes.

Es decir, los demócratas accedieron al reclamo del congresista Joe Manchin, y bajaron $100 semanales a los desembolsos semanales por desempleo.

Del lado de los cheques de estímulo económico, ya los demócratas accedieron a inicios de la semana a una propuesta para que el ala menos progresista no se opusiera a la medida. La enmienda en ese caso no cambia el total de los cheques, es decir, los cheques directos continuarán siendo de $1,400. Lo que cambia, en cambio, es el rango de elegibilidad que establece la medida para esos cheques.

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En los estímulos anteriores, la base para recibir los cheques completos fue de $80,000. O sea, individuos que devengaran anualmente $80,000 o menos recibían todo el estímulo. Esta vez, la medida establece en $75,000 o menos el salario individual para recibir el cheque de $1,400 completo.

Además de los pagos directos de 1,400 dólares y el subsidio al desempleo, el rescate incluye asignaciones de 350,000 millones de dólares para gobiernos locales y estatales; 20,000 millones de dólares para un plan nacional de vacunación y otros 50,000 para el sistema de test.

El rescate incluye también fondos para aerolíneas, sistemas locales de transporte y la red ferroviaria, así como para programas de comida, ayudas al alquiler o financiación para la reapertura de escuelas.