La comunidad escolar de la Escuela Santa Teresita en Ponce está solicitando al gobierno de Puerto Rico y al Departamento de Educación (DE), que movilice 30 refugiados que permanecen en este planel escolar para poder dar inicio a las clases.

El fin de este ente es dar inicio a las labores de clases tras más de 60 días del paso del huracán María por la isla.

'Coincidimos con el reclamo de la comunidad para que los refugiados sean ubicados en el lugar más adecuado para que se libere el plantel y los estudiantes puedan regresar a clases', lee una comunicación escrita del colectivo Educamos en referencia a esta problemática.

Consecuentemente, el ente establece que el plantel ya cuenta con agua y luz luego del fenómeno atmosferico y de paso, establece que a pesar del exodo registrado en la isla, la escuela cuenta con una matrícula sólida.

'Se trata de una escuela elemental que antes del huracán tenía una matrícula de alrededor de casi 250 estudiantes luego de una intensa labor para aumentar la cantidad de alumnos en la escuela. Se calcula que unos 50 se han ido luego del huracán. Actualmente la matrícula está en más de 180. Una cantidad sustancial de ellos está en el Programa de Educación Especial. El plantel cuenta con un salón contenido y tres de autismo. Entre docentes y otros funcionarios, el personal suma unas 50 personas', continùa diciendo la comunicación.

Educamos solicitó la intervención tanto del DE como del gobierno de Puerto Rico para lograr remover estos damnificados 'con las garantías necesarias para que puedan vivir adecuadamente' y de igual modo, dar paso al inicio de clases en el plantel escolar.