Fin al curso de mandarín en las escuelas públicas
La iniciativa de enseñar mandarín en las escuelas públicas del país, ideada por el Departamento de Desarrollo Económico y Comercio (DDEC) mediante su secretario Manuel Laboy Rivera, y el Departamento de Educación (DE) a través de su entonces secretaria Julia B. Keleher, fue de corta duración sin intenciones actuales de darle continuidad al proyecto.
El punto final a esta iniciativa, según el actual secretario de Educación, Eligio Hernández Pérez, se basa en la falta de fondos públicos y un cambio de prioridades de la agencia.
'No ha continuado el proyecto de mandarín. Todos los fondos disponibles del Departamento de Educación están siendo recogidos y destinados a asegurar la prestación de servicios en las escuelas, incluyendo educación especial, así que las contrataciones no esenciales y discrecionales de la Oficina del Secretario están en cero', señaló Hernández Pérez.
En el 2017, Laboy Rivera y Keleher anunciaron la inauguración del programa piloto que beneficiaría a 20 estudiantes de escuelas especializadas, tras la inversión de $15,000 a través del Programa de Desarrollo de la Juventud. Con ese dinero, se compraron los materiales y se pagó la mitad del salario de la maestra radicada en Puerto Rico y que sería adiestrada por la escuela superior de la Universidad de Stanford.
El trato consistía en que el DDEC recibiría de parte de Stanford la plataforma para impartir el curso en línea de 52 horas contacto, el sílabo, los materiales instruccionales y el adiestramiento de la maestra.
'El concepto que se tenía de un contrato por servicios profesionales no ha continuado en este año académico. Se empezó en algún momento, habían unos estudiantes participantes, nosotros tenemos alrededor de tres, cuatro escuelas de idiomas, no obstante, desde la Oficina del Secretario, al día de hoy, de servicios directos para la Oficina del Secretario hay cero contratos desde que finalizó el año fiscal y empezó el nuevo. Hay cero contratos en la Oficina del Secretario', insistió Hernández Pérez a su salida de La Fortaleza.
Durante el segundo semestre, los 20 estudiantes que se beneficiarían de la iniciativa suponían aumentar a 100, ya que se esperaba ampliar el proyecto a más alumnos fuera de las escuelas especializadas. Esta expansión requería una inversión adicional por parte del gobierno.
A preguntas de la prensa, Hernández Pérez no pudo precisar el monto final invertido en la totalidad del proyecto de enseñanza de mandarín.
La idea de enseñar este idioma surgió en tiempos en que el gobierno adoptó el lema de 'ser creativos' en la manera en que se elaboraban nuevas oportunidades de crecimiento social y económico ante el panorama fiscal de Puerto Rico por los pasados diez años, visión impartida y repetida por el entonces gobernador Ricardo Rosselló Nevares.
Sumado a eso, al momento del anuncio Laboy Rivera subrayó la importancia de la iniciativa porque servía de preparación para la ola de inversionistas provenientes de Oriente y a la posible exportación de servicios a otras áreas del mundo que provocaría la implementación de la reforma contributiva federal, aprobada por el presidente de los Estados Unidos, Donald J. Trump, en esas fechas. En esa línea, el mandarín era visto como una manera de atraer nuevos inversionistas y crear oportunidades de empleo, según Laboy Rivera.
Igualmente, tanto Laboy Rivera como Keleher justificaron que el mandarín era uno de los idiomas más populares del mundo, así como uno de los cinco que el Departamento de Estado federal denominó como necesarios para la seguridad nacional y un puente hacia nuevas culturas. Por esa razón, restaron importancia a las críticas que habían enfrentado por priorizar la enseñanza de un nuevo idioma antes de corregir los problemas registrados en las materias de Español y de Inglés.
El designado secretario del DE, Eligio Hernández depone en la Vista Pública de la Comisión de Hacienda sobre el presupuestorecomendado para el próximo año fiscal. (Nahira Montcourt / NotiCel)