El gobernador Ricardo Rosselló Nevares firmó una orden ejecutiva para extender por seis meses el periodo que tienen los miembros de la Policía y los bomberos del Departamento de Seguridad Pública (DSP) para utilizar los excesos acumulados por licencia de vacaciones y enfermedad.

La decisión del Primer Mandatario estuvo instada por el efecto hace un año de los huracanes Irma y María, según comunicó en declaraciones escritas. 'El impacto de los huracanes Irma y María tuvo repercusiones particulares y más prolongadas en la labor de los policías y bomberos de Puerto Rico quienes, en cumplimiento con su deber, se han visto imposibilitados de agotar sus excesos en licencias de vacaciones y enfermedad', dijo.

Como regla general, el periodo para que los empleados públicos agoten los excesos en las licencias de vacaciones y enfermedad vence el 31 de diciembre de cada año, sin embargo, la movida de conceder seis meses adicionales busca incentivar la labor de ambos cuerpos. 'Para garantizar que todos nuestros policías y bomberos puedan continuar ejerciendo sus funciones en la recuperación y puedan disfrutar de las licencias acumuladas a las que tienen derecho, he ordenado extender el periodo para utilizar sus excesos de licencias por seis meses adicionales', sostuvo Rosselló al respecto.

'Por otro lado, logramos retener los 45 bomberos del programa federal hasta diciembre y seguimos buscando alternativas para que puedan permanecer más allá de esa fecha', sostuvo tambien el Gobernador pese a que la directora ejecutiva de la Junta de Control Fiscal (JCF), Natalie Jaresko indicó la pasada semana en conferencia de prensa que el organismo espera por información del Gobierno de Puerto Rico que revele un partida de fondos para que estos trabajadores puedan continuar en su puestos puestos.