El Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) vigila un disturbio situado en Georgia que mantiene un 80% de probabilidad de desarrollo ciclónico en los próximos cinco días.

Según sostiene un informe del NHC, las condiciones ambientales estarán propicias para el desarrollo de este sistema. En esa línea, se espera que se mueve al sur de Estados Unidos y que pueda provocar fuertes lluvias en zonas como Texas y Florida.

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Florida debe monitorear constantemente este sistema.