El fuego que consumió recientemente la Torre Grenfell, en Londres, trajo a la mente de varias generaciones el siniestro ocurrido en Puerto Rico, en el Hotel Dupont Plaza en la decada de 1980.

Y precisamente, después de este devastador incidente que aún permanece fresco en la mente de muchos puertorriqueños, se establecieron nuevos requerimientos para el manejo adecuado de emergencias de este tipo en el caso de edificios de alta elevación, según explicó Ángel Crespo, quien fuera jefe de Bomberos durante la pasada administración, y quien ahora se desempeña como profesor universitario y asesor en asuntos de seguridad.

'Lo primero que deberíamos explicar es que, según el código de incendios, un edificio de alta elevación es aquel de 75 pies o más, desde el punto más alto hasta el punto de acceso a un vehículo o camión de bomberos', dijo.

Crespo detalló que, de acuerdo al código de incendios, hay una serie de lineamientos que se deben cumplir en los edificios de gran altura para prevenir este tipo de desgracia.

'El primer punto es que todos los edificios tienen que tener un sistema de armas interconectadas que es un sistema eléctrico con resguardo de batería. Se trata de esas palancas rojas que se ven en los edificios. Tienen que tener una alerta manual y automática. En el caso de que se active e manera manual, se emite una alerta a un panel digital que activa todos los sistemas de alarma, que cuentan con una luz especial para personas que no escuchan y tienen bocinas de alerta que van por encima de los 85 decibeles', apuntó.

En el caso de que se active de manera automática, dijo, la alerta se genera de manera similar, pero a través de los detectores de incendio.

El segundo punto que destacó está relacionado con el sistema de tuberías. 'Tiene que haber un sistema de tubería con conexión siamesas para los bomberos', explicó. El cuerpo de bomberos ingresa con sus mangueras al edificio, pero este sistema proporciona mayor presión para que se realice mejor el funcionamiento de extinción.

Los medios de salida adecuados, son el tercer punto que destacó y fue enfático en que deben estar completamente libres.

'Me refiero a los pasillos, las puertas y las escaleras. Los ascensores no son medios de salida, son un medio de transporte en condiciones normales. En las emergencias se utilizan las escaleras designadas para esos fines, que son aquellas que tienen una barra que se empuja. El objetivo de esa barra es que, si viene mucha gente de golpe, se empuja la puerta y no se tranca. Además, debe tener un brazo mecánico que la mantenga cerrada para que permanezca libre de humo y de calor, y que sea capaz de sostener altas temperatura por cuatro horas y media, para que no colapse', explicó.

'Todos estos medios de salida, tienen que tener un alumbrado de emergencia con resguardo de batería hasta ocho horas. Las escaleras no se pueden utilizar para almacenar nada. Eso es una violación crasa al código de incendios', añadió.

Por último, recalcó la importancia de la planificación en cuanto al desalojo. Los edificios deben contar con un mapa que muestre claramente los puntos de salida y establezcan un lugar de reunión en las afueras de la instalación. Recomendó que los bomberos visiten al menos una vez al año los edificios para examinar los paneles de alarma, las tuberías y los extintores portátiles.

Aclaró que los casos de los hoteles, oficinas y hospitales, llevan protocolos más sofisticados que en los casos de edificios residenciales como los que mencionó.

Crespo cuenta con una página de Internet en la que ofrece orientaciones relacionadas al tema de seguridad, crespoadvisor.com, y también está en las redes sociales como @AngelCrespoAdvisor en Facebook, y @CrespoAdvisor en Twitter.