Las Justas de la LAI, históricamente, son testigos de eternas rivalidades, de dinastías que parecían no acabarse y hasta de marcas en atletismo que parecían imposibles.

Sin embargo, muy poca veces, ocurre lo que pasó en la final de softbol femenino.

Y es que sobre la septima entrada del juego final, entre la Cocodrilas de la UMET y las Juanas del Recinto Universitario de Mayagüez, se vivió uno de los momentos mas emotivos de estas Justas, un padre rival de su hija, confundiendose en un abrazo en medio de un sonoro aplauso, que provocó que los que presenciaron el momento en el estadio Julio Rivera de Hormigueros, comenzaran a llorar.

El emotivo episodio ocurrió cuando el dirigente de la UMET Gerardo 'Jerry' Flores, recibió a su hija Yaidi Flores, la lanzadora estrella del RUM, en momentos que su equipo ya se le escapaba el campeonato.

Ambos se habían enfrentado anteriormente, pero nada se compara con la adrenalina que se vivió en el segundo juego de la serie final. Para Flores fue difícil ver a su padre con los colores rosa y negro de las Cocodrilas, aunque aceptó que ambos salieron a hacer su trabajo.

'(Es) inolvidable, inexplicable. Lo mejor que me ha pasado es el Colegio y nada, plata con sabor a oro definitivamente', acotó la lanzadora, quien a pesar de no haber seleccionado al equipo de su padre, su trayectoria con la novena fue una experiencia única e irrepetible.

Entretanto su padre, se mostró orgullo por el gran trabajo monticular de su hija frente al RUM.

'Le doy gracias a papito Dios por esto. El Colegio jugó 110 entradas y ella lanzó 109 así que obviamente el sentimiento de papá va por encima de cualquier cosa', dijo el entrenador de la UMET.

El trabajo de ambos durante la temporada fue de altura.

Y a pesar de que la UMET consiguió su tercer campeonato seguido en el softbol femenino de la LAI, no hay sentimiento que pueda describir lo que significó para padre e hija enfrentarse en una final, mas allá de abrazarse y decirse ‘Te Amo'.