Legisladores cobran el doble que los maestros y casi el triple de policías
Los salarios que devengarán los miembros de la Asamblea Legislativa, ahora mediante el concepto del legislador ciudadano, son cuatro veces mayores al sueldo de un empleado de mantenimiento de las carreteras, y el doble de lo que devenga anualmente un maestro.
El proyecto aprobado la semana pasada en la Cámara de Representantes deja inalterados los sueldos anuales de los legisladores, pese a que ahora trabajarán menos tiempo en el Capitolio. En promedio los legisladores cobrarán $73,775 anuales.
Los vicepresidentes de los cuerpos legislativos, los portavoces de los partidos políticos y los presidentes de las comisiones de Hacienda y de Gobierno, los salarios serán de $84,841 anuales. A su vez, para los presidentes de la Cámara y el Senado, el salario anual será de $110,663.
De acuerdo al Bureau of Labor Statistics, actualmente un cocinero de un establecimiento de comidas rápidas, devenga un salario anual de $17,210; un empleado de mantenimiento en las carreteras cobra $17,280 anuales; y un chofer de guagua gana $17,540 al año; lo que es cuatro veces menor al sueldo de los legisladores promedios.
Asimismo, los legisladores promedio devengan tres veces y medio más que una secretaria, cuyo sueldo anual es de $20,700. Más aun, al final del año los legisladores promedio cobrarán el doble que un maestro, cuyo salario es de $31,470, y casi el triple que un policía, cuyo salario registrado en el gobierno federal es de $27,000.
Mientras los Presidente de la Cámara y del Senado devengarán casi el doble que un abogado, cuyo salario anual es de $68,350.
En general, la compensación de $73,775 anuales pone a los legisladores en el grupo más alto tope de salarios que registra el Departamento del Trabajo federal, estando los representantes del pueblo en el mismo renglón que cirujanos, obstetras, gerentes generales, pilotos, corredores de finanzas, jueces e ingenieros. Por debajo tendrían al resto, incluyendo maestros de todo nivel, agentes de seguro, contables, quimicos, optómetras, electricistas, y mecánicos.
Entretanto, pese a que el salario promedio de un legislador promedio aumentó en un 23% en 11 años, los salarios de los chóferes de guagua solo se incrementaron en un 8%, y el de los cocineros de los establecimientos de comida rápida en un 22%. Incluso, otras profesiones, como los empleados de mantenimiento de carreteras, sus sueldos se redujeron en un 3 % durante ese mismo periodo.