San Juan - La organización Puerto Rico por la Familia sigue en pie de lucha por 'el bienestar de nuestra niñez', aunque sin lograr una movilización como la de 2013 frente a El Capitolio para manifestarse contra proyectos de ley para prohibir el discrimen por orientación sexual en el empleo y la protección de parejas LGBTT bajo la Ley 54.

El martes en la mañana se lanzaron nuevamente a la calle para, en esta ocasión, denunciar frente a las oficinas centrales del Departamento de Educación (DE) en Hato Rey lo que consideran un atropello en contra de sus valores cristianos por un gobierno que desea 'enseñar que la confusión de unos pocos como algo normal', según contó a NotiCel el reverendo César Vázquez.

'Básicamente, pedimos que recapacitensobre la directriz de que los niños que se sientan niña puedan usar uniforme de niña y la posibilidad, según lo dijo el Secretario (Rafael Román en una entrevista radial), de que se puedan utilizar los baños compartidos por ambos sexos', explicó el reverendo Vázquez.

El 12 de octubre se hizo pública la Carta Circular número 16 en la que, entre otras disposiciones sobre el uso del uniforme escolar en el sistema público de enseñanza, dice que 'no se impondrá la utilización de una pieza en particular de ropa a estudiantes que no se sientan cómodos con la misma por su orientación sexual o identidad de género'. Además, 'el DE tiene la función primaria de atender el proceso de aprendizaje y no es partícipe del maltrato emocional que (la imposición de una pieza particular de ropa) pueda generar'. La carta no menciona regulación alguna respecto al uso de los baños.Entienden los manifestantes que, con esta declaración, el gobierno atenta contra el derecho fundamental de los padres a educar a sus hijos de acuerdo a sus valores cristianos, considerando las orientaciones sexuales noheterosexuales, y la disforia de género, como conductas anormales.'Lo que pasa es que estas dos proposiciones no son sino la consecuencia práctica de una ideología que llaman perspectiva de género, una ideología que dice que no existe una diferencia fundamental entre el hombre y la mujer y que cada cual tiene el derecho de construir su propia sexualidad sin ningún límite externo', dijo Vázquez a este medio.Además, cuestionan el 'atropello' a la libertad de conciencia y de religión de los padres, niños y maestros, siendo estos últimos quienes tendrán que escoger entre afirmar 'una conducta equivocada o ser disciplinados por un sistema secuestrado ideológicamente por unas minorías con acceso al poder'.'No es hablar, es cómo se habla. Una cosa es decir que hay distorsiones, que hay problemas, que hay parafilias. Otra cosa es presentarlas como normal. Una cosa es decir que una persona tiene un trastorno de identidad de sexo y otra cosa es decir que eso es su derecho, que es normal y correcto', sentenció Vázquez, portavoz de Puerto Rico por la Familia.En la actividad hubo unas cien personas que se aglutinaron frente a las oficinas centrales del DE. Entre los líderes religiosos presentes estuvieron Carlos Pérez, Alberto Rodríguez, Ricky Rosado y Walter Santiago.