Ariel Castro encontrado muerto en su celda por aparente suicidio
Ariel Castro, el puertorriqueño que mantuvo como rehenes a tres mujeres, a las que tambien violó, fue encontrado muerto en su celda la noche del martes por aparente suicidio mediante ahorcamiento, confirmaron autoridades correccionales de Cleveland.
En una declaración escrita, la oficial JoEllen Smith, del Departamento de Corrección de Ohio, indicó que el hallazgo fue hecho a las 9:20 pm y que Castro fue declarado muerto a las 10:52 pm después de que se le administraran en vano técnicas de resucitación.
Castro estaba en una celda de solitaria del Centro de Recepción Correccional de Orient, Ohio. Estaba bajo 'custodia protectiva', lo que requiere que esté encerrado en solitaria y que los oficiales le hagan rondas cada 30 minutos. La oficial indicó que el evento está siendo investigado y que harán más declaraciones al terminar la evaluación.
El 26 de julio pasado, Castro evadió la pena capital al declararse culpable y ser sentenciado a 1,000 años de prisión sin la posibilidad de probatoria por un total de 977 cargos, entre ellos 512 por secuestro, 446 por violación y siete por abuso sexual. Además, estaba acusado de dos cargos de homicidio agravado por supuestamente golpear a una de las mujeres hasta causarle un aborto. También se le imputaron seis cargos por asalto sexual, tres cargos por negligencia infantil y un cargo por posesión de herramientas delictivas.
Castro recibió el 1 de agosto una condena a cadena perpetua sin derecho a libertad condicional por el cargo más grave al que se enfrentaba, el de homicidio agravado, por golpear a una de las mujeres durante el cautiverio hasta causarle un aborto.
Por el resto de los casi 1,000 cargos, entre ellos cientos por violación, Castro recibió varias condenas consecutivas que suman otros 1,000 años más en prisión.
La sentencia respondía al acuerdo de culpabilidad que su defensa acordó con la fiscalía para que Castro se librará de la pena de muerte.
El día del juicio, el condenado pidió perdón a sus víctimas al inicio de la audiencia.
'No soy un monstruo. Estoy enfermo', dijo. 'Creo que yo soy también una víctima', sostuvo vestido con el típico mono naranja de los presidiarios y una prominente barba.
Castro relató entonces que había sufrido abusos sexuales siendo joven y habló también de su adicción a la pornografía.
'No estoy tratando de poner excusas. Sé que obré mal, pero no soy una persona violenta', indicó.
Castro relató que en la casa en la que mantuvo secuestradas a las tres mujeres había 'armonía' y que las acusaciones de abusos sexuales eran 'falsas', puesto que, según él, 'muchas veces' ellas le pedían tener sexo.
Castro fue acusado de mantener en cautiverio, durante más de diez años en su casa de Cleveland (Ohio), a Amanda Berry, Gina DeJesus y Michelle Knight, quienes lograron escapar en mayo pasado. Las tres mujeres, Berry, de 27 años; DeJesús, de 23, y Knight, de 32, han regresado a vivir con sus familiares. La primera de ellas tuvo una hija con Castro, que ahora tiene seis años.
La 'casa de horrores' que fue su prisión ya fue demolida.