Presidente chileno pide perdón y anuncia reformas tras cinco días de protestas
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, anunció este martes una agenda social para reformar el sistema de pensiones, la salud y los medicamentos, los ingresos mínimos y las tarifas eléctricas, entre otras medidas, tras pedir perdón a los ciudadanos por no haber visto sus necesidades.
La agenda social anunciada por el mandatario contempla también mayores impuestos a los sectores más pudientes, la creación de una Defensoría de las Víctimas, una reducción de las dietas de los parlamentarios y altos sueldos de la administración pública.
Piñera presentó estas medidas en una cadena nacional en las horas finales del quinto día de masivas protestas de la ciudadanía en reclamo de un país más equitativo, y mientras gran parte del país se encuentra en estado de emergencia y bajo toque de queda con el Ejército a cargo de la seguridad, dados los desmanes y actos vandálicos que han acompañado este estallido social.
A continuación, las principales medidas anunciadas por Piñera:
Pensiones
La reforma de las pensiones contempla incrementos en el llamado Pilar Solidario (por el que el Estado participa en el sistema de pensiones), con un incremento del 20 % de la Pensión Básica Solidaria y de otro 20 % en el Aporte Previsional Solidario, lo que, según dijo, beneficiará a 590,000 y 945,000 pensionados, respectivamente.
Además, anunció un aumento adicional de las pensiones básicas y los aportes previsionales solidarios durante los años 2021 y 2022, para los pensionados mayores de 75 años; aportes de recursos fiscales para complementar el ahorro previsional de la clase media y las mujeres que trabajan y cotizan, y aportes de recursos fiscales para mejorar las pensiones de los adultos mayores no valentes.
El sistema de pensiones es uno de los puntos que más rechazo concita en la sociedad chilena. Obliga a los trabajadores a depositar cada mes cerca del 12 % de su sueldo en cuentas individuales manejadas por entidades privadas que entregan en promedio pensiones de unos 220 dólares, poco más de la mitad del sueldo mínimo, que está en 422 dólares mensuales.
Salud y medicamentos
Anunció un tratamiento legislativo de 'urgencia' de un proyecto de ley que ya había enviado al Congreso para crear el Seguro de Enfermedades Catastróficas, 'de forma de asegurar un techo al gasto de salud de las familias'.
Dijo también que creará un seguro que cubra parte del gasto en medicamentos de las familias chilenas y una ampliación del convenio del Fondo Nacional de Salud (Fonasa) con las farmacias para reducir el precio de los medicamentos.
Ingreso mínimo garantizado
El mandatario anunció la creación de un ingreso mínimo garantizado de 350,000 pesos (unos 482 dólares) que complementan el salario de los trabajadores a jornada completa cuando sea inferior a esa cantidad, beneficio que se aplicará en forma proporcional a los menores de 15 y mayores de 65 años.
Impuesto a los ricos
Las rentas superiores a 8 millones de pesos mensuales (unos 11,000 dólares) pagarán un impuesto del 40 %, mediante el cual se espera recaudar 160,000 millones, que servirán para financiar estas nuevas medidas, dijo el mandatario.
Reducción de dietas parlamentarias y sueldos públicos
Piñera anunció que una reducción de las dietas de los parlamentarios y altos sueldos de la administración pública, además de una reducción de los parlamentarios y una limitación de las veces que pueden ser reelecciones.
Tarifas eléctricas
Prometió la creación de un mecanismo de estabilización de las tarifas eléctricas, que permitirá anular la reciente alza 9.2 % de la electricidad.
Además, pidió al Congreso que acelere el trámite de algunos proyectos de ley enviados por el Gobierno sobre para proteger a los niños y adolescentes y a los ancianos que no pueden valerse por si mismo.
Finalmente, anunció un plan de reconstrucción dotado en 350 millones de dólares para la reconstrucción de los daños y destrucciones provocados por la violencia y delincuencia ocurrida en los últimos días en Chile.
La mayor protesta en Chile desde 1990, cuando se recuperó la democracia, no ha cesado en cinco días y ha dejado al país inmerso en una crisis que arroja las siguientes cifras:
15 muertos. Cinco de ellos murieron presuntamente a manos de agentes del Estado, según el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH). La Fiscalía confirmó cuatro fallecieron por acción de los militares. Entre las víctimas hay dos colombianos, un peruano y un ecuatoriano.
226 heridos. Sin un reporte aún oficial de heridos, el INDH ha contabilizado 226, de ellos 123 por arma de fuego, mientras que, por su parte, los Carabineros afirman que no menos de 400 de sus miembros han resultado con algún tipo de lesión en enfrentamientos con los manifestantes.
5,400 detenidos. El número de detenidos ha aumentado de manera exponencial desde que comenzaron los toques de queda. A pesar de que el INDH tiene contabilizados 1,692 arrestos, de lo que 220 eran menores de edad, la Fiscalía afirma haber procesado a 5,400 detenidos desde el viernes.
10,000 uniformados. Con el estado de excepción y los toques de queda, el Ejército chileno está a cargo del orden y se calcula que ha desplegado a nivel nacional unos 10,000 efectivos de las fuerzas del orden entre militares, carabineros y policías de investigaciones (DPI).
830 pesos. Era el nuevo precio para los pasajes en el Metro de Santiago, equivalente a 1.14 dólares. Esa tarifa, cuyo aumento en 30 pesos (0.04 dólares) ha sido ya anulado, fue la gota que colmó el vaso para que estallaran unas protestas que apuntan a las bajas pensiones y altos precios de universidades y servicios de salud.
$300 millones. Es la evaluación preliminar del coste de reparar y recuperar el sistema del Metro de Santiago, donde hubo daños en 77 de sus 136 estaciones, de ellas nueve calcinadas junto a varios trenes, lo que ha dejado la red con la Línea 1 como la única operativa parcialmente.
2.5 millones de viajeros. Es la estimación de las personas que se han quedado sin utilizar el Metro por su infraestructura dañada, que en condiciones normales realiza al menos 2.7 millones de viajes cada día. El lunes la Línea 1, que concentra el 38 % de los viajes de toda la red, solo transportó al 22 % de sus pasajeros habituales.
347 vuelos cancelados. El aeropuerto Arturo Merino Benítez, de Santiago de Chile, que es el mayor del país, permaneció casi sin operaciones durante buena parte del fin de semana. Las aerolíneas chilenas cancelaron la mayor parte de sus vuelos nacionales e internacionales. Latam dejó de operar 250 vuelos.
2,000 escuelas cerradas. Ni el lunes ni este martes ha habido clases escolares de primaria y secundaria en casi toda la capital chilena. Muy pocas escuelas han abierto y la mayoría de las universidades también permanecen cerradas, lo que hace que miles de estudiantes se sumen a las protestas.
12.3 millones de personas bajo toque de queda. Casi dos terceras partes de la población de Chile estuvieron impedidos de salir a las calles en la noche de este martes por los distintos toques de queda decretados en regiones, provincias y ciudades, entre ellas toda la región de la capital chilena.
Miles de personas participan en una nueva jornada de protestas este martes, en Santiago (Chile). (EFE)