Diez años de prisión para médico por cometer fraude a Medicare
El doctor Jose López Díaz fue sentenciado esta mañana a unos 10 años y un mes en prisión tras ser encontrado culpable en junio de 2012 cometer fraude al programa de salud de Medicare Advantage y robo de identidad de pacientes de forma agravada.
El juez Francisco Besosa, del Tribunal Federal, le impuso una sentencia de 97 meses en prisión por fraude al programade Medicare y 24 meses por los cargos de robo de identidad. Igualmente,debe cumplir 3 años de libertad supervisada.
El galeno sería inmediatamente ingresado al Centro Metropolitano de Detención (MDC, por sus siglas en inglés) de Guaynabo, a pesar del intento infructuoso de su abogado de defensa, el licenciado Julio Gil, de que esto no ocurriera debido a las condiciones de la institución.
Tras conocer la decisión López Díaz se despidió de sus familiares, quienes lloraron en sala.
A López Díaz se le adjudicó el haber presentado en total sobre 10 mil reclamaciones falsas a las aseguradoras, entre ellas, MCS, MMM, Triple S y PMC. Igualmente, se le acusó de ser la cabecilla del esquema, en el que también participaron el dentista Carlos López Díaz, hermano del ahora convicto; las dos hijas del convicto y otros dos empleados.
A las hijas del convicto se les envió a un programa de desvió, mientras, el hermano sería sentenciado mañana. A este último se le adjudicó el haber conspirado con el convicto para que proveyera información de sus pacientes en la clínica dental, para facturar por servicios no prestados.
Entre los puntos trascendentales de este caso, el fiscal Wallace Bustelo, asignado a la Oficina del Inspector General para el Departamento de Salud Federal, resaltó que López Díaz facturó por servicios supuestamente prestados en la Sala de Emergencia del Guaynabo Medical Center, cuando nunca trabajó en la institución. Y también facturó el haber practicado procedimiento urinario a supuestas pacientes mujeres, cuando es un estudio que se practica solo en hombres.
Durante la vista de hoy, su abogado abogó sin éxito por una sentencia mínima, alegando que este no era el caso para condenar a una persona a muchos años en prisión. Además trajo a la atención la situación que ha sufrido tanto el convicto como su familia durante el proceso judicial.
Besosa se mantuvo firme que él tenía que considerar también el mensaje que se le llevaría a la sociedad con la sentencia impuesta a López Díaz.
Previo a escuchar su sentencia, López Díaz se dirigió a la corte para solicitar el certificado de restitución de los fondos de Medicare, aduciendo que ésta era prueba exculpatoria que probaría su inocencia en un nuevo juicio.
'Esta prueba es muy probable que pueda demostrar que el convicto sea inocente…. Lo que se debe evaluar, en sí la prueba omitida, puede cambiar la perspectiva del fallo condenatorio… La verdad y la justicia se puede lograr en esta corte, y tengo la certeza de que se producirá la absolución con la nueva prueba', manifestó López Díaz.