El negocio cerró tras una avería en uno de los cables que eleva su comedor a unos 100 pies, pero recientemente reabrió.

Una pareja de Georgia que estuvo en el restaurante Fly Dining en febrero pasado cuando se soltó uno de los claves que eleva su comedor a unos 100 pies, demandó reclamando lesiones y sufrimiento por la experiencia.

Fly Dining abrió en la isla en enero de 2024 en una localidad en la calle Loíza. Tras el cierre en febrero pasado por el incidente del cable, la semana pasada reabrió en el área de los muelles de Puerta de Tierra, donde ubicaba The Wheel. Su concepto es cena o “brunch” con 24 comensales en una plataforma que se eleva unos 100 pies mediante una grúa y agarre con cables de tensión.

Al reabrir la semana pasada, el dueño de Flydining PR LLC, el inversionista residente Scott Zuckerman, aseguró a El Nuevo Día que había reforzado la seguridad, pero no fue específico.

Los demandantes en la reclamación federal sometida el 5 de agosto pasado son el matrimonio de Aspen y George Martin, residentes de Georgia. Estos plantearon que fueron en un grupo de nueve que celebraba un cumpleaños el 23 de febrero pasado a mediodía para la oferta de “Brunch in the Sky”.

“Antes de que la plataforma se elevara, un empleado del demandado informó a la Sra. Martin que la grúa había emitido una advertencia de funcionamiento defectuoso. A pesar de esta advertencia, los empleados del demandado procedieron con el evento, diciéndole a los huéspedes que le ‘echarían un ojo’, en vez de cancelar el evento debido al asunto del equipo”, indicó el matrimonio demandante.

“Cuando la plataforma se elevaba, el cable de seguridad se soltó. La plataforma se inclinó de manera inmediata y violenta, causando que oscilara descontroladamente hasta que golpeó la grúa. Esto causó que los tragos volaran y que los huéspedes entraran en pánico”, continuó el relato al finalizar con que el descenso duró unos cinco minutos y que dos empleadas con arneses de seguridad se lanzaron de la plataforma.

Como daños, Aspen Martin asegura que sufre discos herniados en la espalda y el cuello, lo que ha requerido tratamiento con inyecciones y que cambiara su escuela porque no puede guiar distancias largas.

La acción fue sometida en el Tribunal de los Estados Unidos para el distrito de Puerto Rico.

Historia relacionada: Se le suelta un cable al restaurante colgante FlyDining de calle Loíza