A pesar de la distancia de su tierra natal, Doraliz Ortiz de Leon aceptó la invitación para hacer de Dubai su nuevo hogar cuando hace cuatro años le hicieron una oferta de empleo a su esposo como piloto de una línea aerea en la ciudad de Medio Oriente.

En aquel entonces, ambos decidieron asumir el reto de dejar a sus familias y dar un giro completo a sus vidas en búsqueda de nuevas experiencias y crecimiento profesional.

Ortiz de León, una abogada graduada de la UPR en Cayey y de la Harvard Law Scool en Boston, pensó que se le haría fácil conseguir empleo, pero no fue exactamente así que ocurrió.

'Llegué en medio de la crisis económica del 2008. Cuando hicimos planes de venir, pensé que se me iba a hacer muy fácil conseguir empleo aquí, pero cuando llego están todos los bufetes de abogados cerrando. Me tomó tiempo, pero después empecé a trabajar part time con un bufete. Finalmente, después de dos años conseguí empleo con la Compañía de Petróleo Nacional de los Emiratos (ENOC, por sus siglas en inglés)', contó Ortiz de León, quien trabaja en la división legal de la compañía.

Actualmente, Dubai es la 22da ciudad más cara del mundo y ha sido catalogada como el mejor lugar para vivir en Medio Oriente. El descubrimiento de yacimientos de petróleo logró levantar su economía por mucho tiempo, aunque hoy día, el ingreso de petróleo representa sólo un 4% del Producto Internacional Bruto y han logrado diversificar sus fuentes de ingreso. Sus esfuerzos fueron dirigidos hacia la construcción, el comercio y los servicios financieros, incluyendo el turismo.

'Están muy abiertos a los inversionistas extranjeros. Históricamente Dubai siempre ha tenido posición de comercio, un lugar donde conecta a África y Asia con Europa. Vienen muchas personas del mundo y se les hace muy fácil. Además, no cobran impuesto sobre ingresos', contó la puertorriqueña.

Para la licenciadalas diferencias culturales no fueron difíciles de asimilar, puesDubaitiene personas de más de 100 nacionalidades y el inglés es el idioma que se dialoga en los centros de trabajo y entre las personas de diferentes naciones.

'Uno viene sin saber qué esperar porque uno desconoce de la cultura de esta área, pero no es muy diferente. Eso sí son más conservadores', explicóOrtiz de León, quien rápido hizo referencia a las prohibiciones de bebidas alcohólicas y la forma de vestir menos exhibicionista entre los residentes de la ciudad cuya religión oficial es el Islam.

Aunque las circunstancias, por las cuales realizó el viaje, cambiaron en un momento dado, a la puertorriqueña le gustó tanto el estilo de vida de la ciudad cosmopolita que quiso quedarse permanentemente.

Esa tranquilidad y seguridad que sentía en el país extranjero fueron, precisamente, los factores principales que fascinaron a Ortiz de León. 'El estilo de vida, la calidad de vida, el balance entre la vida personal y el trabajo es muy bueno. Prácticamente no hay crimen. Como mujer puedo salir en altas horas de la noche y andar sin miedo', comentó.

Para enfatizarlo, la puertorriqueña contó que cuando recibió la visita de su madre la llevó a un festival al que acuden miles de personas y se les quedó la cámara digital en un restaurante, donde fueron a cenar. 'Una amiga me recomendó que llamara a la Policía del área y yo por cumplir con mi mamá regresé, después de dos días, al cuartel de la policía para ver si habían encontrado la cámara. Obviamente pensando dentro de mi que iba ser imposible. Y no se por cuantas manos pasó, pero la Policía tenía allí la cámara dos días después'.

Entre las cosas que más le ha gustado de la ciudad es el poder desenvolverse en actividades de placer y ocio, como clases de yoga y pilates.

Según la boricua, la seguridad de la ciudad se debe a una combinación de dos: la población es bien religiosa y las leyes bien estrictas. 'Son bien estrictos, el sistema legal. Lamentablemente, si te arresta la policía no tienes derecho a abogado, te pueden exportar, puedes perder tu empleo. Tienes mucho que perder como el derecho de volver a entrar al país y tu empleo', comentó.

A pesar de esta rigurosidad legal, la sensación de seguridad y tranquilidad, dice, que es inestimable. 'Me mantengo al tanto de las noticias del País y desearía que mi familia, en Puerto Rico, pudiera compartir esa sensación de salir a la calle sin miedo', mencionó la abogada.