Se cuela plan de $2,300 millones de AEE en negociaciones con bonistas
Un informe de la contrapropuesta de los bonistas para reestructurar la deuda de la Autoridad de Energía Electrica (AEE), que fue rechazada por la corporación publica esta semana, provee detalles sobre aspectos financieros de las negociaciones que no habían sido dados a la luz pública.
El informe de Houlihan Lokey obtenido por NotiCel establece que el 1ro de junio la AEE hizo público su plan de negocios para la utilidad pública que provee $2,300 millones de inversión de capital hasta el 2030 con el fin de revitalizar las operaciones de la AEE, reducir los costos de electricidad a largo plazo y cumplir con regulaciones ambientales de la EPA.
Los bonistas que negocian la reestructuración de deuda con la AEE apoyan la propuesta de la corporación pública en torno al plan de inversión capital, las iniciativas de rerstructuración operacional y las reformas de tarifas a clientes.
El plan de la AEE también contempla el financiamiento de titulización (que es convertir activos o préstamos en valores negociables en el mercado), como parte del plan de recapitalizar a la corporación pública.
Los bonistas entraron en negociaciones con la AEE en julio del 2014. La AEE produjo su primer plan integral para los bonistas el 1 de junio de 2015. Desde el 1 de junio, la AEE y los bonistas han estado negociando en tres áreas: los términos específicos del refinanciamiento, la reestructuración de la deuda y el proceso de privatización de los activos de nueva energía.
El 25 de junio, los bonistas recibieron de la AEE una propuesta de financiamiento sobre cómo la corporación pública trataría las obligaciones de deuda y una propuesta de $1,100 millones de deuda titulizada para financiar mejoras capitales. Los bonistas rechazaron la propuesta de la deuda pero se enfocaron en la titulizacion para tratar de zanjar diferencias.
El 7 de julio, los bonistas hicieron su contrapropuesta, que fue rechazada por las aseguradoras de bonos de la AEE. Los bonistas mantienen que su contrapropuesta ofrece tarifas bajas de electricidad, baja el servicio de la deuda y provee alivios a los pagos de deuda.
La contrapropuesta provee para intercambiar unos $8,100 millones en bonos de la AEE a una estructura titulizada o de valores negociables en dos tramos. El Tramo A comprende el 70% del principal y el Tramo B, el 30% del principal. Se les impone un cargo a los clientes para ayudar con el intercambio pero la contrapropuesta le ahorraría unos $2,500 millones a la AEE en 10 años comparado al servicio de la deuda actual.
La propuesta de la AEE consiste en un intercambio de bonos con diferimiento del pago del principal por un periodo de cinco años pero sí se pagaría 1% de interés. La parte del plan que dice cuánto del dinero de la deuda se intercambiaría fue borrada del informe.
En cuanto a los planes de mejoras capitales, tanto la AEE como los bonistas proponen el uso de las unidades de la Central Aguirre para mejorar eficiencia.También proponen invertir $387 millones entre el 2020 a 2022 para repotenciar a través del flujo de caja generado internamente. También están de acuerdo en invertir unos $292 millones en promedio para mantenimiento entre el 2016 y el 2025.
Ambas propuestas coinciden en retirar unidades en las plantas de Palo Seco, Costa Sur y San Juan y la repotenciación de Costa Sur y Aguirre para mejorar la eficiencia.
'La propuesta de los bonistas contempla tanto la posibilidad de la generación de energía por la propia AEE y de manera privatizada en Aguirre. Los bonistas creen que la generación privatizada puede reducir las tarifas para los clientes de la AEE. Los asesores de la AEE han declarado que puede haber retrasos sustanciales en los permisos y autorizaciones para la generación privatizada de energía, lo que hace que la incorporación de energía privatizada en la estructura actual sea imposible. Sin embargo, la AEE puede perseguir la privatización y reducir aún más las tasas para los clientes de la AEE ', dice el informe.
Los bonistas también proponen una estructura de tarifas a clientes que cubra todos los gastos, incluyendo los de combustible. La tarifa se podría ajustar mensualmente para reflejar los gastos. La estructura asume que la misma se podría revisar cada tres años.