El rostro del precandidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Bernie Sanders, oscila tras el podio entre la risa afable y el ceño fruncido. La risa cuando se disculpa por la pobre pronunciación de su español, cuando comenta sobre algún futuro soñado; el ceño fruncido, entre el disgusto y la firmeza, cuando habla de Wall Street, de los fondos buitres, de la austeridad, de la relación colonial.

Por todos esos temas transitó el senador por el estado de Vermont durante su intervención en la mañana de hoy, lunes, en la Fundación Luis Muñoz Marín, que marcó el inicio de su jornada en Puerto Rico.

Sanders comenzó su discurso en inglés frente a todos los presentes, tildando la crisis en Puerto Rico como 'una crisis humanitaria' a la que la respuesta no puede ser medidas de austeridad que incrementen 'el sufrimiento de los trabajadores'.

La deuda de 70 billones de dólares que el gobierno de Puerto Rico en numerosas ocasiones ha reiterado impagable, Sanders también la catalogó como 'insustentable' debido a que 'estamos lidiando con la avaricia, la codicia de esos fondos buitres'.

'Tenemos que hacer claro que estos gerentes de fondos buitres billonarios no pueden tenerlo todo. Los niños de Puerto Rico no pueden pasar hambre, perder educación o salud por ellos', manifestó.

Es por esto que tronó en contra de medidas que impidan al Gobierno garantizar los servicios sociales debido al pago de la deuda, entre las que criticó la eliminación de escuelas públicas, el despido de maestros, la reducción de pensiones y la disminución de sueldos mínimos que atentaría contra la calidad de la vida por un lado, y que por otro, tampoco resolverían la crisis, según el político.

A la vez, clamó por la reestructuración y una auditoría independiente de la deuda, proporcionando a Puerto Rico un tiempo razonable para que ponga en práctica proyectos de desarrollo económico y creación de empleos. Asimismo, recordó la ayuda que se le ofreció a Wall Street cuando casi tocó las puertas de la bancarrota. En esa ocasión, se le brindó más de 15 trillones de dólares, virtualmente con cero porciento de tasa de interés.

'Si la Reserva Federal pudo ayudar a Wall Street, también puede ayudar a la Isla', pronunció.

Otras medidas de revitalización económica que ofreció el candidato fueron que Puerto Rico se moviera a una economía de energía limpia y renovable, en contraste con la dependencia actual de combustible fósil que es perjudicial para el ambiente y para el bolsillo.

Además, en esa exhortación a poner en práctica medidas de crecimiento económico, Sanders resaltó el trato colonial con que Estados Unidos se relaciona con Puerto Rico, lo cual objetó rotundamente. Por lo tanto, durante el primer año de su administración presidencial, propuso la puesta en marcha de un referendo en que los puertorriqueños puedan votar por tres acciones a respetarse: la estadidad, la independencia o una reforma del Estado Libre Asociado.

También, Sanders exigió al presidente Barack Obama la excarcelación de Oscar López Rivera, quien ha estado tras los barrotes durante 34 años, 'más años que Nelson Mandela', dijo el candidato. La petición por su liberación apoyada por diversos sectores sociales, demuestran la necesidad de que López Rivera pase sus últimos años en su país, defendió el senador.

En cuanto a la educación, Sanders abogó una vez más por una educación gratuita desde los primeros años hasta el nivel universitario, idea que, repitió, no es radical si se compara con países como Alemania, Dinamarca, Suecia y demás naciones que brindan herramientas de fácil acceso para que la ciudadanía se eduque.

En vez de gastar trillones de dólares en guerras, sostuvo Sanders, se debería invertir en los niños y su educación temprana, que es la etapa formativa de mayor relevancia, agregó.

Por otro lado, tildó de 'precario' el sistema de salud de Puerto Rico, algo que también para el congresista debe ser un derecho accesible para todos, en vez de un privilegio.

Además, Sanders apoyó con un 'sí' rotundo y en español, la descriminalización de la marihuana. Criticó los miles de récords policiales que se han creado por posesión de marihuana, lo cual luego limita las posibilidades de un ciudadano de concretar un puesto de trabajo. Además, propuso que las adicciones a drogas como el opio y la heroína sean considerados asuntos salubristas, y no criminales.

Todos los asientos que miraban hacia el podio, cercado por una bandera estadounidense y una puertorriqueña, estaban ocupados. La sala llena vociferó en varias ocasiones el nombre de 'Bernie', al que también dedicaron aplausos sostenidos y ovaciones.

El candidato a la Gobernación por el Partido del Pueblo Trabajador, Rafael Bernabe, el exgobernador Aníbal Acevedo Vilá, la exsecretaria de Estado, Ingrid Vila, el senador Luis Vega Ramos y el candidato independiente Manuel Cidre fueron algunas de las figuras de la política local que ocuparon la primera fila en la actividad, luego de algunos haberse reunido con Sanders para hablar sobre el plan económico para la Isla.

Luego de su paso por la Fundación, Sanders hizo una visita relámpago a Centro Médico. En la tarde, se reunirá con la comunidad en la Escuela Juan Ponce de León Montessori en Guaynabo, y terminará en una conferencia abierta al público en el Teatro de la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras, donde abundará sobre el proyecto PROMESA y el acceso a la educación superior.