Clemente, Alomar, Peruchín y Tany juntos en Guaynabo
Unas cien personas tuvieron el privilegio hoy de formar parte de la apertura de la exhibición de las placas del Salón de la Fama de Béisbol de los puertorriqueños Roberto Clemente, Orlando 'Peruchín' Cepeda y Roberto Alomar, y el cubano Tany Pérez.
El evento, que se celebró en el Museo del Deporte de Puerto Rico en Guaynabo, proseguirá mañana en el mismo recinto para el público y se moverá después durante los próximos días respectivamente hasta el 19 del corriente mes al Centro de Convenciones de Guayama, al Albergue Olímpico de Salinas y al coliseo Salvador Dijols en Ponce.
Entre los presentes, estuvo el presidente del Salón de la Fama de Béisbol, Jeff Idelson, quien destacó en entrevista con Efe que la ocasión es 'especial' debido a que no es común que la Sala de los Inmortales saque sus placas y las exhiban en otros lugares.
Idelson recordó que la última ocasión que alguna de las placas de los expeloteros boricuas se había exhibido anteriormente, fue la de Clemente Walker en el 2000, después de que corrigieran sus apellidos, pues estaban invertidos.
Asimismo, en República Dominicana se exhibió la del exlanzador Juan Marichal. Pero nunca se habían mostrado tantas en el exterior lo que podría encaminarse para que en el futuro se exhiban más placas a raíz de la inclusión de futuros miembros latinoamericanos al Salón de la Fama.
'Quisimos hacer esto para que los seguidores del béisbol en Puerto Rico admiren a sus leyendas. Este evento significa mucho para todos los amantes del deporte en la isla', abundó Idelson.
Alomar fue el último exjugador del cuarteto de inmortales que ingresó al Salón de la Fama, cuando junto al exlanzador holandés Bert Blyleven y el gerente general Pat Gillick, fueron exaltados en julio pasado en Cooperstown, Nueva York.
Idelson destacó la carrera de Alomar, a quien describió como 'el mejor antesalista defensivo' que haya visto en su vida, pues tuvo la oportunidad de seguir su carrera mientras trabajaba para los Medias Rojas de Boston y los Yanquis de Nueva York.
Sobre Cepeda, Idelson admitió que fue el primer pelotero puertorriqueño que conoció cuando jugó con los Medias Rojas en el 1973 y después, cuando comenzó la posición de bateador designado en la Liga Americana en el 1974.
Clemente entró al Salón de la Fama en 1973, un año después de su muerte; Cepeda en 1999 por el Comité de Veteranos tras culminar por el máximo de 15 años de votaciones por la Asociación de Cronistas del Béisbol, mientras que Pérez ingresó al mismo en el 2000.
Alomar bateó .300 con 2.724 imparables, 474 robos, doce Juegos de Estrellas, diez Guantes de Oro y 1.508 carreras anotadas en 17 temporadas con los Padres de San Diego, Indios de Cleveland, Orioles de Baltimore, Diamondbacks de Arizona y Medias Blancas de Chicago.
Alomar, Clemente y Willie Mays son los únicos tres jugadores en la historia que han alcanzado más de .300 de promedio de bateo, que además han logrado diez Guantes de Oro, que han sido seleccionado a diez Juegos de Estrellas y que al menos han ganado dos Series Mundiales.
Clemente se convirtió el 30 de septiembre del 1972 en el primer pelotero latinoamericano en la historia de las mayores y el undécimo jugador en conectar 3.000 imparables, cifra que automáticamente lleva a cualquier jugador al Salón de la Fama.
Clemente, quien jugó 18 temporadas con los Piratas de Pittsburgh, murió el 31 de diciembre del 1972 mientras transportaba ayuda a los damnificados de un terremoto que azotó Nicaragua días anteriores, dejando un legado importante no solo en el béisbol, sino por su ayuda al prójimo.
Clemente entró al Salón de la Fama en el 1973, un año después de su muerte. Solo tres jugadores en la historia de las Grandes Ligas han sido seleccionados para estar en la inmortalidad del béisbol luego de un año de su retiro. Todo pelotero retirado debe esperar cinco años para su posible entrada al recinto.
En 23 temporadas, Pérez culminó con 379 cuadrangulares, 1.652 carreras impulsadas y .279 de promedio de bateo.
Formó parte también de 'La maquinaria roja', donde en la década del setenta, ganó dos títulos y en la que también estuvieron leyendas como Pete Rose, Joe Morgan, Johnny Bench, George Foster, David Concepción y César Gerónimo.