Los republicanos se afanan en remendar el plan fiscal de Trump, que ya afecta en la Bolsa
Wall Street abrió en rojo este miércoles y el dólar se vio afectado ya que los inversores vendieron activos preocupados por este proyecto de ley.
Washington (EFE).- Los republicanos de la Cámara de Representantes de Estados Unidos se afanan este miércoles en retocar el plan fiscal del presidente, Donald Trump, para conseguir el 'sí' de los más críticos y evitar una caída importante de la Bolsa, que ya muestra signos de preocupación.
El polémico plan de recortes presupuestarios y rebajas fiscales sigue sin contar con la aprobación de todos los suyos en la Cámara Baja después incluso de que el propio mandatario celebrara una reunión el martes con legisladores de su formación.
Pese a que el neoyorquino se refirió a la reunión como "un gran encuentro" "de unidad y amor" y consideró que el proyecto va a llegar al pleno "muy pronto" y va a conseguir "un gran apoyo", algunos republicanos declararon estar en contra.
De los tres votos en contra que Trump se puede permitir si quiere que su plan de recortes salga adelante, debido a la ajustada mayoría de los republicanos en ese hemiciclo, ya tiene uno asegurado, y parece que no es el único.
El legislador republicano de Kentucky Thomas Massie aseguró que su voto sigue siendo negativo y que no hay nada que le mueva a cambiarlo. Según él, el proyecto aumentará el déficit y la deuda.
Aunque esto no se podrá comprobar hasta que el proyecto no entre en vigor, si lo consigue, los mercados ya muestran signos de preocupación por este plan fiscal.
Wall Street abrió en rojo este miércoles, la rentabilidad de los bonos de deuda estadounidenses se situaba al alza y el dólar se vio afectado ya que los inversores vendieron activos preocupados por este proyecto de ley.
"Todos los ojos están puestos ahora en el proyecto de ley, ya que el acuerdo final contribuirá en gran medida a determinar cómo de grande se vuelve el déficit de Estados Unidos en los próximos años", indicaron los analistas de Deutsche Bank en una nota recogida por CNBC.
Los congresistas están celebrando sesiones maratónicas para lograr la aprobación del proyecto antes del Día de los Caídos, el 26 de mayo, con la intención de que llegue al Despacho Oval antes del simbólico 4 de julio, Día de la Independencia estadounidense.
Algunos medios señalan que la votación podría celebrarse en las próximas horas, pero parece que las jornadas de trabajo no están consiguiendo recoser el partido.
El legislador de Maryland Andy Harris, líder del grupo más radical dentro del partido, el Freedom Caucus, explicó que el proyecto "ha empeorado durante la noche".
"Es imposible que se apruebe hoy. Puede que necesitemos un par de semanas para limarlo todo", dijo a Newsmax.
Harris forma parte del grupo de quienes exigen recortes más inmediatos, ya que aseguran que los que se plantean en la iniciativa del mandatario se verán reflejados a largo plazo.
Los centristas piden no ir tan lejos
Un grupo de republicanos de los estados tradicionalmente demócratas han estado presionando para que se aumente el límite de las deducciones fiscales estatales y locales, conocidas en inglés como SALT.
Pero parece que estos legisladores ya no son un problema porque han llegado a un acuerdo con el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, para elevar estos límites, según el diario The Washington Post.
Sin embargo, esto puede distanciar todavía más a los más radicales de votar 'sí' al proyecto.
Otro bloque, aunque menos mayoritario, en el que se encuentran los más centristas, pide no ir tan lejos en los recortes de algunos programas de ayudas o en la cobertura sanitaria Medicare.
Según la oficina de presupuesto del Congreso, la ley obligaría a recortar casi 500,000 millones de dólares a Medicare a partir de 2026 y añadiría 2.3 billones de dólares al déficit en diez años, publicó The Washington Post.