Durante el proceso de negociaciones de los distintos proyectos de ley -sucedidos tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado de los Estados Unidos-, que culminarían en la aprobación de la Ley PROMESA, múltiples compañías de distintos sectores, principalmente estadounidenses, realizaron importantes esfuerzos de cabildeo, según revelan los informes oficiales publicados por Open Secrets.

Los campos a los que se circunscribe la actividad de dichas entidades en Puerto Rico son, fundamentalmente, el farmacéutico, biotecnológico y de ingeniería, seguros, salud, sector financiero y distintas organizaciones federales de defensa de los derechos del ciudadano y de los trabajadores. Pese a que se tiene conocimiento de que estas firmas cabildearon o bien por todos, o tan solo por alguno de los proyectos de ley que finalizarían en la aprobación de PROMESA el 30 de junio de 2016, se desconoce la intenciónu objetivos de estos aportes económicos.

Movimientos de las farmacéuticas como uno de los ejes principales

En el sector de la industria farmacéutica,uno de los principales propulsores de la economía puertorriqueña pese a la supresión de la Sección 936 en el año 2006, las compañías norteamericanas Abbvie Inc., Johnson & Johnson, Merck <><> Co., Bristol-Myers Squibb y Cardinal Health, todas ellas con sedes, intereses y operaciones en Puerto Rico, cabildearon por PROMESA./p

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En el caso de Abbvie Inc., quien mantiene una importante planta de manufacturaen el municipio de Barceloneta, cabildeó directamente como compañía por un amplio número de proyectos de ley, entre los cuales se encontraba la disposición 'H.R. 4900, H.R. 5278 <><><><> S. 2328, PROMESA' (los tres textos legales que configuraron dicha normativa federal). Si bien la partida total destinada fue de $1,700,000.00, se desconoce la cantidad exacta que fue dirigida a este asunto debido a que los reportes de cabildeo no obligan a llegar a ese detalle./p

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Por otra parte, en su contribución económica al nuevo texto que definiría el futuro político y económico de Puerto Rico, también hizo uso de distintas firmas de cabildeo profesionales como Capitol Tax Partners, LLP, la mayor empresa de consultoría independiente de los EE.UU, especializada en impuestos y asuntos regulatorios, en donde invirtió $60,000, si bien se desconoce la cantidad final destinada a PROMESA. Asimismo, lo hizo a través del bufete de abogados Brownstein Hyatt Farber Schreck, LLP, así como de la firma W Strategies, LLC, especializada en relaciones gubernamentales y grupos de presión, ambas entidades con sede en Washington DC./p

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La archiconocida Johnson Johnson, encargada de la manufactura de artículos farmacéuticos, de diagnóstico, terapéuticos, de cirugía, productos biotecnológicos e incluso de higiene personal, cabildeó directamente como empresa por valor de $2,040,000.00. Esta cantidad fue dirigida a un sinnúmero de intereses, entre los que se encontraba '-HR 4900/ HR 5278/ S 2328, 'PROMESA', respecto a las disposiciones relacionadas con la reestructuración de la deuda de Puerto Rico. Johnson <><> Johnson cuenta con operaciones en Guaynabo, Gurabo, Aguadilla y Manatí./p

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Por su parte, Merck <><><><><><><><> Co es otro de los fabricantes y distribuidores más reconocidos del sector. En Puerto Rico, cuenta con una oficina en Carolina encargada de gestionar las operaciones comerciales, así como una instalación manufacturera en Las Piedras. Con el objetivo de cabildear por PROMESA y otras iniciativas legales, contrató a la firma de cabildeo y consultoría The Nickles Group, LLC, con sede en Washington DC, por $45,000.00./p

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Dicha firma de consultoría también brindó sus servicios a Bristol-Myers Squibb, con sede central en Nueva York, quien dispone, entre su extensa estrategia internacional, de dos plantas manufactureras en Humacao y Manatí. Bristol destinó un total de $60,000 para, entre otros objetivos, cabildear por la 'Supervisión de H.R. 5278, PROMESA, referente a la situación financiera en Puerto Rico'./p

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Por su parte, Cardinal Health, con sede en Guaynabo, influenció mediante contribución económica directamente como empresa, con un importe de $290,000 dirigidos a diversos asuntos relacionados con la salud médica. Entre los mismos, destacó 'H.R. 5278, Ley para la Supervisión, Administración y Estabilidad Económica de Puerto Rico (PROMESA)'./p

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Dentro de lo que podríamos considerar el ramo de compañías farmacéuticas, aunque sus operaciones se extiendan a otros negocios derivados de la salud, podrían añadirse los esfuerzos de cabildeo efectuados por Medtronic, corporación que se autodefine en su página web como 'la mayor empresa independiente de desarrollo de tecnología médica del mundo'. Medtronic cabildeó como entidad por valor de $920,000.00. Uno de los puntos del informe revela que también se interesó por el devenir económico de la isla./p

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Sin embargo, sus esfuerzos económicos en pos de este objetivo no concluyeron ahí: al igual que sus homólogas Merck <><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><> Co y Bristol-Myers Squibb, contrató a The Nickles Group, LLC, a quien transfirió $60,000 para el cabildeo de múltiples tras bastidores legales, entre los que se encontraba 'H.R. 5278, PROMESA, en lo concerniente al estado financiero de Puerto Rico'. En la actualidad, Medtronic cuenta con operaciones activas en Villalba, Humacao, Juncos y Guaynabo./p

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strongEl pulso de las empresas de desarrollo tecnológico, energético e ingeniería/strong/p

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Otros de los sectores más dinámicos en sus esfuerzos de cabildeo por los proyectos de ley mencionados fueron los de tecnología, biotecnología, energía e ingeniería. La californiana Amgen Inc., junto a United Technologies, AES Corporation, Honeywell International, Energy Answers Corporation, GDF Suez, Praxair Inc. y Excelerate Energy LLC son los principales referentes, todas ellas corporaciones internacionales con distintos intereses económicos en Puerto Rico./p

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Amgen Inc. es una firma especializada en biotecnología con sede central en Thousand Oaks, California e instalaciones en Juncos, que realizó un esfuerzo de cabildeo como empresa por un total de $ 1,750,000.00. Uno de los intereses hacia los que desvió cierta cantidad –indeterminada- fue para el primer proyecto de ley presentado por Sean Duffy, representante del Distrito 7 de Wisconsin por el Partido Republicano en el Congreso, considerado como el padre de PROMESA./p

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Mucho más activas fueron las labores de presión en el Congreso ejercidas por United Technologies, conglomerado tecnológico norteamericano que incluye a diversas compañías relacionadas con la industria aeroespacial como, por ejemplo, UTC Aerospace Systems, cuya sede descansa en Carolina del Norte. El gigante económico es incluso dueño de Otis, una de las más prestigiosas firmas de elevadores del mundo. En Puerto Rico, cuentan con un centro especializado en la producción de componentes aeroespaciales en Santa Isabel./p

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Uno de los informes recuperados por NotiCel reveló que United Technologies cabildeó por valor de $2,330,000, y que, de la maraña de asuntos de interés recopilados en dicho informe, uno de ellos enunciaba 'Disposiciones fiscales de Puerto Rico, HR 4900'. En otro esfuerzo de presión llevado a cabo poco tiempo después, se destinaron otros $2,208,000. En este caso, el proyecto de Ley por el cual se cabildeó fue el H.R.5278 (PROMESA)./p

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A los esfuerzos individuales, se sumó también la contratación de la empresa de consultoría sobre asuntos de gobierno Republic Consulting, LLC, con sede en Hebron, Kentucky, a quien designó $30,000. Parte de esta cantidad fue derivada al subtema 'Monitorear la legislación para hacer frente a la crisis de la deuda de Puerto Rico (H.R. 5278, S. 2328)'./p

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Es preciso destacar que este conglomerado se ha situado en el ojo del huracán de la discusión pública tras haber obtenido la promesa de importantes beneficios fiscales de la mano del presidente electoDonald Trump. El resultado de estas negociaciones, si bien ha conseguido retener a 1,000 de los 2,200 empleos que pensaban suprimirse por el desplazamiento de ciertas operaciones de la compañía a México, podría sentar un precedente que permitiría a las grandes multinacionales obtener, tal y como argumentó el senador demócrata Bernie Sanders, injustos beneficios contributivos y exenciones fiscales ante posibles amenazas de deslocalización./p

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Uno de los grandes competidores de United Technologies en la industria aeroespacial (aunque abarca una multiplicidad de sectores de diversa naturaleza) es Honeywell International, gigante empresarial con sede en Morristown, Nueva Jersey. En Puerto Rico, cuenta con instalaciones y oficinas en Aguadilla, Moca y Guaynabo./p

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Honeywell también cabildeó por PROMESA, haciéndose con los servicios de la firma The Duberstein Group Inc., con sede en Washington D.C., a la que proporcionó $90,000./p

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El sector energético también jugó sus fichas en la gran partida de PROMESA, y múltiples fueron sus jugadores. Por un lado, Excelerate Energy, compañía dedicada al mercado de gas natural licuado (GNL), con sede en The Woodlands, Texas, contrató a la empresa de cabildeo independiente Van Scoyoc Associates, a la que proporcionó $50,000 para premisas relacionadas directamente con su mercado de negocio tales como 'Puerto Rico, asuntos relacionados con el GNL' y 'H.R.5278, Ley para la Supervisión, Administración y Estabilidad Económica de Puerto Rico (PROMESA)'./p

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A ello se suma la contribución de Energy Answers Corporation (EAC), organización empresarial neoyorquina que mantiene una importante división en la isla que impulsa una incineradora en Arecibo y cuyas funciones varían desde el reciclado de residuos, la producción de energía desde fuentes sostenibles o la promoción de educación ambiental. EAC cabildeó a través de SC Partners por un total de $10,000. Uno de los tres puntos mencionados en el informe es 'PROMESA (H.R. 5278) - Apoyo a la provisión de proyectos críticos para la revitalización de la infraestructura de Puerto Rico'./p

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Otro de los todopoderosos conglomerados de energía implicados fue Engie, esta vez a través de su filial GDF SUEZ Energy North America Inc. Según su página web, Engie es responsable de una serie de empresas de energía que abarcan los mercados de Estados Unidos y Canadá, con operaciones comerciales que incluyen desde la venta de energía al por menor, suministro energético a clientes comerciales, industriales y residenciales, producción de gas natural, distribución de gas natural licuado y generación y cogeneración de electricidad. Todos ellos ámbitos que están atendidos prominentemente en la Ley PROMESA que otorga prioridad a este tipo de proyecto./p

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GDF Suez Energy cabildeó por valor de $70,000 para, entre otros asuntos relacionados con el campo de la energía, el siguiente: 'H.R. 5278, PROMESA (Disposiciones relativas a la supervisión de la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico)'./p

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Por último, Praxair Inc., considerado el primer fabricante y proveedor de dióxido de carbono del mundo así como uno de los principales productores a escala global de toda clase de gases industriales, destinó $120,000 para, entre otros temas, atender asuntos relacionados con las reformas fiscales y energéticas incluidas en los proyectos de ley S 2328 y HR 5278, padre y madre de PROMESA respectivamente./p

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strongParticipación de grupos financieros y aseguradoras/strong/p

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El sector financiero, el cual ha estado directamente relacionado con las polémicas emisiones de bonos gubernamentales que socavaron a lo largo de los últimos veinticinco años las dolientes arcas estatales, también tomaron parte activa en las negociaciones suscitadas al albor de PROMESA./p

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Las firmas Massachusetts Mutual Life Insurance, Citygroup, New York Life Insurance Company (NYLIC), Ambac Financial Group y Allstate Insurance componen el grueso fundamental en esta parcela económica./p

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Con oficinas en la avenida Ponce de León, Santurce, Massachusetts Mutual Life Insurance es un poderoso grupo financiero que cabildeó como empresa por valor de $1,070,000, con el objetivo de influir en una amplia lista de proyectos de ley o asuntos. En lo referente a Puerto Rico, centró sus objetivos en aquellas medidas relacionadas con los procesos de reestructuración de la economía boricua y su hipotético acceso al Capítulo 9 o Ley de Quiebras, opción que, durante las primeras formulaciones hacia una posible viabilidad económica llegó a considerase como una de las alternativas factibles, lo que provocó el firme rechazo del frente republicano y conservador norteamericano. En otro informe, se refleja otra partida económica por valor de $750,000./p

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También hizo uso de grupos de cabildeo profesional al contratar al bufete de abogados Davis Harman LLP, con sede en Washington DC y especializado en ayudar a instituciones financieras y a grandes empresas a encontrar soluciones eficaces relacionadas con impuestos. Sus esfuerzos constantes de presión revelan la importancia de la problemática y contexto puertorriqueños para esta compañía, puesto que también se hicieron con los servicios de la firma de relaciones gubernamentales Porterfield, Fettig Sears, LLC, o con los del prestigioso bufete de abogados neoyorquino Kramer Levin Naftalis <><><><><><><> Frankel LLP, a los que destinó cientos de miles de dólares./p

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A su vez, el grupo financiero y bancario Citigroup, con presencia en la isla bajo su filial Citibank Puerto Rico, es considerada la mayor empresa en su sector a escala mundial. Al igual que United Technologies, cabildeó a través de Republic Consulting, LLC por un total de $50,000.00, que dirigió, entre otros, a los dos últimos proyectos de ley que configurarían PROMESA./p

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Otra de las entidades que influyó en la negociación de estos dos textos legislativos fue New York Life Insurance Company, la mayor compañía de fondos de seguros de vida de los Estados Unidos y una de las mayores aseguradoras de vida en el mundo. Lo hizo directamente como empresa, y también a través de la firma de consultoría Harbinger Strategies, LLC./p

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Por otra parte, la sociedad de cartera estadounidense Ambac Group, quien trabaja también con seguros de bonos y otros servicios financieros, destinó $150,000 al cabildeo de varios asuntos, todos ellos relacionados con la situación económica de Puerto Rico y, de una u otra manera, con los proyectos de ley PROMESA. Paralelamente, Allstate Insurance, con oficinas en la calle Andalucía, Viejo San Juan, contrató por $50,000 a la firma de cabildeo con sede en Washington DC, Peck Madigan Jones./p