En cuestión de días el Departamento de Educación contrató cerca de 900 maestros durante el mes de diciembre, lo que ha levantado suspicacia en el magisterio. Sin embargo, el secretario de Educación, Rafael Román, negó que esta movida busque amortiguar el impacto de la lucha magisterial en las líneas de piquete.

Según Román desde la primera semana de diciembre el Departamento se enfrascó en la tarea de llenar las 913 vacantes que había de personas que se habían retirado.Además, comenzarían un proceso para nombrar entre 250 a 275 maestros que habían renunciado durante el año o que se encontraban fuera por licencia de enfermedad, proceso que esperan completar próximamente.

El funcionario planteó que hasta la fecha la agencia habría nombrado el 98% de los maestros que hacían falta en el sistema.

A cuestionamientos de si con estos nombramientos el Departamento pretendía sustituir a los maestros que esta semana participan del paro de 48 horas convocado por las organizaciones magisteriales, Román puntualizó 'no, los maestros que se han contratado en diciembre son maestros que han sido contratados para sustituir a los que se retiraron o renunciaron'.

'No son rompehuelgas. Como tampoco es rompehuelgas el maestro que cumple con su responsabilidad. El maestro que asista el martes y el miércoles a trabajar no es un rompehuelgas. Es un maestro que está ratificando y reafirmando su compromiso y su deber ministerial y constitucional de ofrecer la educación, que es el derecho de los estudiantes', agregó Román en entrevista con este diario digital el pasado viernes.

En conferencia de prensa el lunes, el funcionario precisó que la expectativa es que otros 5,000 maestros se jubilen durante este curso escolar, por lo que se abrió unas convocatorias de reclutamiento.

No obstante, el presidente de UNETE, Emilio Nieves, tuvo sus reservas con las intenciones de los nombramientos.

'Si el Gobierno está haciendo eso, el Gobierno está creando las condiciones para la confrontación. Así que nosotros no vamos a responder a ningún tipo de provocación, que la va a ver de parte del Gobierno, y van a tener personas que van a acercarse a los piquetes para tratar de crear situaciones de confrontación', apuntó Nieves.

De hecho, detalló que las organizaciones magisteriales han creado un Comité de Disciplina para atender ese tipo de situaciones.

De acuerdo a Nieves, los maestros nombrados se tienen que someter a pruebas de dopaje, y 'yo estimo que para el martes y miércoles, no van a incorporarse al Departamento de Educación. Y si algunos de esos casos los envían a algunas de esas escuelas, no van a entrar a las escuelas ante la línea de piquete y cierre de portones'.

Este se mostró suspicaz en que en un mes el Gobierno hubiera llenado cerca de 900 plazas, mientras en un año no había podido completar el proceso de reclutamiento de maestros.

Por su parte, la presidenta de EDUCAMOS, Eva Ayala, destacó que para el proceso de reclutamiento se han estado nombrando maestros recién graduados de la universidad, y no necesariamente los que tienen las competencias y cumplen con los requisitos para ocupar las plazas.

'Si a nosotros nos exigen estar altamente cualificados para dar cualquier materia, eso es lo propio que debe hacer y respetar el Secretario', determinó Ayala.

Mientras tanto, la presidenta de la Asociación de Maestros, Aida Díaz, tuvo cuidado en afirmar que los maestros que se han contratado desde enero sean rompehuelgas, pero señaló ha habido un proceso irregular en la contratación de directores escolares.

En conferencia de prensa el lunes, Díaz, criticó que para llenar las vacantes dentro del sistema el Departamento de Educación este contratando estudiantes recién graduación que tenían un promedio de 2.00.

'Cómo vamos a enseñar? Cuál va a ser la calidad de educación que tengamos en el futuro?', cuestionó Díaz.

Ante estos planteamientos, Román argumentó que se está conformando una lista de candidatos de estudiantes que en mayo se gradúan, que tengan un promedio mínimo de 2.80 y al menos 9 créditos completados en alguna especialidad.

De otro lado, Román confirmó que el Departamento cuenta con planes alternos por si los maestros no se presentan a los salones de clase mañana martes y el miércoles. Sin embargo, fue evasivo a preguntas de la prensa de cuáles eran los planes, señalando que quería evitar 'malas interpretaciones'.

Finalmente, a cuestionamientos de este diario, Román, dejó entrever que pudiera ajustar el calendario escolar si los estudiantes no pueden tomar sus clases el martes y miércoles.