La Universidad de Puerto Rico (UPR) realizó el jueves, la Ceremonia de Distinción Academica en la cual otorgó a un hijo adoptivo de Puerto Rico, Francisco Carvajal Narváez, el grado de Doctor Honoris Causa, por su compromiso y contribución a la Universidad y al País para que la educación llegue a todos los sectores sociales.

'Hoy honramos la vida, el trabajo, la visión, el compromiso y el legado de Don Francisco Carvajal Narváez, un gran visionario, una figura internacional que deja profunda huella en sus dos patrias, España y Puerto Rico. Una persona que ha dado verdadera cátedra del significado de la palabra humanismo con su tenacidad, trabajo, dedicación, compromiso y voluntad', expresó el presidente de la UPR, doctor Uroyoán R. Walker Ramos en un comunicado de prensa.

Por su parte, la rectora interina del Recinto de Río Piedras, doctora Ethel Ríos Orlandi, destacó del señor Carvajal que 'cuando examinamos su recorrido apreciamos que de una manera u otra, la educación, en especial la universitaria, ha sido prioritaria en su gestión altruista, convencido de que esta es fundamental para crear una sociedad más igualitaria y justa para todos; una sociedad en la que sea posible la felicidad colectiva. Y se unió a nuestra Universidad, la universidad nacional, posibilitando múltiples proyectos y actividades que abarcan tanto las ciencias naturales como las humanas y sociales y adelantan el compromiso con la democratización de la educación'.

Por recomendación del presidente de la UPR, doctor Uroyoán R. Walker Ramos, la Junta de Gobierno de la UPR otorgó mediante la Certificación 60 (2013-2014) el grado de Doctor Honoris Causa, el más alto título que pueda ser conferido a un ciudadano por sus contribuciones promoviendo el desarrollo de los valores más preciados de la sociedad y en reconocimiento a su altruismo ilimitado con nuestro principal Centro Docente y con el País que lo acogió y él convirtió en su segunda patria.

El Recinto de Río Piedras fue el anfitrión de esta actividad académica, en la cual asistieron representantes de los sectores académicos, obrero, estudiantil y de la comunidad española residente en Puerto Rico, entre otros.

La Fundación Francisco Carvajal Narváez de Puerto Rico aporta cuantiosos fondos a la UPR mediante un acuerdo firmado en el 2008, el cual dio paso al Proyecto para la Democratización del Conocimiento, con sede en el Recinto de Mayagüez, y que promueve la preparación de estudiantes de escuela intermedia y superior provenientes de residenciales públicos para su ingreso a la universidad. Además, apoya actividades académicas y de investigación de alcance comunitario.

Otro proyecto que auspicia es un programa en la Clínica de Asistencia Legal de la Escuela de Derecho de la UPR para dar asesoría legal a grupos comunales de gestión económica.

Asimismo, la Cátedra Francisco Carvajal Narváez, aún pendiente de implantación, está dotada a perpetuidad para auspiciar actividades académicas de amplio alcance en los recintos de Río Piedras, Mayagüez y Ciencias Médicas. A las anteriores se suman múltiples aportaciones vinculadas al desarrollo de las Artes, las Ciencias y las Ciencias Sociales.

Carvajal Narváez formó parte del grupo de exiliados españoles acogido tanto por la UPR como por el proyecto muñocista de renovación económica y social. Llegó a Puerto Rico en 1942 después de combatir del lado republicano en la guerra civil y sufrir en los campos de refugiados en Francia. Su ingenio empresarial encontró terreno fértil en la Operación Manos a la Obra del naciente Estado Libre Asociado. En el 1949 fundó la fábrica textil Olympic Mills, exitosa por la calidad de sus productos así como por las innovaciones organizativas.

Sobre todo se destacó por compartir las ganancias con los trabajadores de la empresa y por sus obras de carácter social. El importante capital acumulado y su solidaridad filantrópica lo llevó a crear dos fundaciones, una en su pueblo natal de Albolote, en la provincia de Granada, y la otra en Puerto Rico, Fundación Francisco Carvajal.