Cuba ha suspendido indefinidamente el servicio postal desde y a Estados Unidos, en un paso más hacia atrás en las relaciones entre ambos países, enemigos declarados por más de 50 años.

La decisión de Cuba intenta empatar el anuncio, días atrás, de la administración Obama restringiendo los viajes de académicos y grupos de iglesias hacia la Isla.

"Hasta nuevo aviso, nosotros no estaremos aceptando correspondencia desde Estados Unidos", comunicó Correos de Cuba el viernes en un anuncio leído en la televisión estatal.

El tránsito postal entre ambos países fue suspendido temprano en la década del 60, poco antes del arribo de Fidel Castro al poder.

Un limitado servicio entre ambos países se reabrió en 2009, luego de conversaciones entre oficiales de Estados Unidos y Cuba.

Pero los envíos fueron nuevamente suspendidos en noviembre del año pasado, luego de la decisión de Estados Unidos de incrementar las medidas de seguridad tras descubrir paquetes con sistemas explosivos enviados desde Yemen.

La respuesta de Cuba incluye suspender todo tipo de carta, paquetes y hasta tarjetas postales con destino a Estados Unidos.