Confinados ahogados: tras responsabilidad criminal
Los secretarios de Justicia, Guillermo Somoza, y de Corrección y Rehabilitación, Jesús González, se expresaron consternados ante la muerte de ocho sumariados, entre ellos un ebanista que obtuvo ayer una orden de excarcelación a su favor, y aseguraron que se está cogiendo la situación 'en caliente' para establecer responsabilidades, de haber habido negligencia por parte de los oficiales de custodia que manejaban el vehículo que fue arrastrado por un golpe de agua.
Y, aunque se realizan investigaciones paralelas, la criminal tiene prioridad sobre la administrativa, pues los empleados de la Administración de Corrección y Rehabilitación no han sido suspendidos en lo que se realizan las pesquisas.
NotiCel supo que uno de los sumariados muertos, el ebanista Juan Huertas Cumba, quien estaba preso por alegado incumplimiento de contrato, había obtenido una orden de excarcelación a su favor en el Tribunal de Bayamón.
'El auto de excarcelación nosotros no lo tenemos porque se perdió en el vehículo (inundado). Todo eso lo estamos investigando', dijo González a preguntas de NotiCel.
Eduardo Alicea Rivera, otra de las víctimas, de 21 años, también tenía orden de excarcelación. Rivera estaba confinado bajo la corte de drogas.
Somoza indicó que la investigación criminal se dirige a establecer si hubo circunstancia negligente o si hubo negligencia crasa, que es cuando una persona conduce un vehículo con 'un claro menosprecio' de la seguridad e integridad física de las personas.
'Todo está encaminado para coger el caso como se deben coger todos, en caliente: Hay dos investigaciones paralelas', destacó el titular de Justicia.
Si fue una circunstancia negligente se pudo haber constituido un delito menos grave que establece una pena de cárcel de seis meses y un día hasta tres años. Por el contrario, si fue negligencia crasa la pena carcelaria podría ser de entre tres años y un día, y ocho años.
'Una negligencia criminal se denomina que es una acción u omisión voluntaria, pero no intencional, que una persona prudente y razonable puede prever los riesgos y es previsible, pero aunque es previsible puede ser obviamente establecida, aunque no querida', explicó Somoza en rueda de prensa.
Los dos guardias penales sobrevivientes serán entrevistados hoy, al igual que los dos sumariados que salieron ilesos del incidente, así como los vecinos que fungieron como rescatistas, precisó Somoza. Los fiscales a cargo de la pesquisa son el del Distrito de Arecibo, Wilson González, y el fiscal Ariel Chico, informó el funcionario.
La investigación administrativa podría culminar en la destitución de los oficiales de custodia si se corrobora que hubo negligencia, dijo, por su parte, González.
'Tenemos que hacer una investigación responsable, verdad, porque si hubo una negligencia queremos tener a la persona que fue responsable de esa negligencia. Sí, los protocolos de Corrección establecen que en situaciones de emergencia lo primero que hay que hacer es soltar los grilletes. Eso está por escrito y es parte del reglamento', destacó.
De acuerdo con versiones de testigos oculares, los oficiales custodios se negaron a abrir las esposas de los reos para presuntamente evitar que se escaparan.
El titular de Corrección y Rehabilitación reconoció que algunas de las víctimas fatales estaban en diferentes etapas de los procesos judiciales, pero no pudo precisar los detalles de cada uno porque la investigación apenas comienza.
'Hay distintos delitos desde un maltrato, Ley de Armas, uso de sustancias, robos, hay varios delitos ahí. Para mí es indistinto si es un caso de pensión alimenticia o de un caso de asesinato en primer grado, yo no estoy hablando aquí de confinados, yo estoy hablando que se perdieron ocho vidas, ocho seres humanos, el delito para mí no es importante', sostuvo González.
'Hay unos casitos que llevaban en proceso de juicio un par de meses y hay otros que eran recientes', afirmó.
Dijo que todos los fallecidos eran boricuas. Además del ebanista Huertas Cuba, los otros siete sumariados que fallecieron fueron identificados como: Edgardo Cabrera Barreto, José Mulero López, Eduardo Alicea Rivera, Roberto Weir Rivera, Ángel Rosario Miranda, Víctor Cosme Sáez y José Canales Velázquez.