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Resucitan cruz de Las Ánimas

Al final, o al principio, de la calle Cruz, según se mire, del Viejo San Juan, había en la época española una cruz en el Bastión de Santa Bárbara, hoy conocida como Las Ánimas, que era un espacio de índole militar. Esa presencia del símbolo religioso, que formó parte del paisaje histórico del casco antiguo de la capital, ha sido simulada, sugerida, desde la libertad del arte. Actualmente otra cruz, en una especie de deconstrucción en tres dimensiones e interactiva, puede apreciarse entre las murallas sobre La Perla y la calle Norzagaray.

en la calle Cruz del Viejo San Juan, donde el público puede conocer un poco de esta pieza que estaba ubicada

La obra al aire libre diseñada por la oficina del arquitecto Jorge Rigau, tiene varias piezas escultóricas que permiten apreciar la cruz. De hecho, para conocer más de la historia de la cruz, todos los viernes, sábados y domingos a las 10:00 am, 3:00 pm y 5:00 pm se brinda una explicación del proyecto. El evento cuenta con el apoyo del National Park Service y es auspiciado por Programa de Subvención Básica para las Artes de la Oficina de Apoyo a las Artes y el Quehacer Cultural del Instituto de Cultura Puertorriqueña.

La existencia de esta cruz que fungía como un vehículo de comunicación entre la ciudad de San Juan y los buques que se acercaban a sus costas, ha sido mencionada en 'Mis Memorias' del poeta y dramaturgo Alejandro Tapia y Rivera. De igual forma, el historiador Arturo Dávila y la doctora Silvia Álvarez Curbelo, directora del Centro de Investigaciones en Comunicación de la Escuela de Comunicación de la Universidad de Puerto Rico, dicen que también los ciudadanos de la Isla aguardaban en la cruz esperando noticias de México y España.

No obstante, los diseñadores aclaran que 'por datar de tiempo inmemorial, no hay forma de saber cómo era la pieza original. Su presencia hoy se evoca de forma perceptual; toca al espectador 'encontrarla', guiándose por textos informativos colocados para ello en la acera norte de la calle Norzagaray'.

A la vez que la pieza conmemora el significado histórico de esta cruz, también celebra el cumplimiento de los 500 años del establecimiento de la Diócesis de la Iglesia Católica de Puerto Rico, una de las primeras en América.

Los ciudadanos tendrán hasta el próximo domingo, 20 de noviembre para disfrutar de esta pieza.

El público puede interactuar con la cruz diseñada en la oficina del arquitecto Jorge Rigau. (Suministrada)
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