Bebé a la que cayó estufa no era maltratada
La autopsia realizada al cuerpo de una bebé que murió aplastada por una estufa de gas en Peñuelas no reveló que la infante haya sido víctima de un patrón de maltrato previo al incidente desgraciado en el que perdió la vida.
Por ello, la teoría que cobra fuerza es la de un fatal accidente, aunque el fiscal a cargo del caso, Ildefonso Torres, no descarta ningún ángulo en la pesquisa.
Torres indicó a NotiCel que habló con el patólogo que realizó la autopsia, doctor Javier Serrano, quien no encontró en el cadáver rastros de violencia.
'A simple vista no surge evidencia alguna de maltrato físico anterior a los eventos (del 6 de julio). Estamos trabajando en una hipótesis a base de la información que nos dieron los familiares de la víctima y la semana que viene estaremos en posición de tomar una decisión', declaró el fiscal en entrevista telefónica con este diario digital.
'No se va a descartar ningún ángulo, pero hasta ahora la hipótesis que se está trabajando es que se trató de un incidente desgraciado', añadió.
Torres dijo que ya se han tomado varias declaraciones juradas y que esperan por el informe oficial del patólogo sobre la cusa de muerte.
La menor de 10 meses de nacida murió en el Hospital San Lucas, donde fue llevada luego que la estufa de gas le cayera encima en hechos ocurridos en su casa en el barrio Tallaboa Encarnación de Peñuelas.
Los padres de la víctima, Víctor Rivera, de 21 años de edad, y Tania Velázquez Rodríguez de 20, estaban durmiendo al momento de ocurrir el incidente que ha conmovido a todos. Al despertar, la pareja se topó con la niña atrapada bajo la pequeña estufa de gas propano.