Niños boricuas viven en pobreza y a la sombra del desempleo
El panorama para el desarrollo de los niños en Puerto Rico luce un tanto sombrío. Y es que el 83% de los menores viven en zonas de alta pobreza, de acuerdo con el estudio Kids Count 2012. La cifra por sí sola es alarmante, pero resalta aún más el gran contraste que representa su comparación con la de Estados Unidos, donde se estima que es el 11% de los niños que viven en condiciones de gran escasez de recursos.
El número en la isla es ocho veces mayor que la tasa general estadounidense. Asimismo, el porcentaje de adolescentes de Puerto Rico que no están en la escuela ni trabajando es la mayor de cualquier jurisdicción estadounidense, duplicando el promedio total en el resto de los Estados Unidos.
Sin embargo, a pesar de las alarmantes cifras, el estudio presentó resultados esperanzadores. Por ejemplo, se han reducido en un 10% las tasas de natalidad de madres adolescentes en el período de 2005 a 2009. También, el número de bebés con bajo peso al nacer se redujo ligeramente en un 3%. Esto, aunque todavía la isla tiene la mayor tasa de bebés bajo peso al nacer, 12.4%. El número de niños de entre 3 y 4 años que asisten al preescolar aumentó en un 6%, pero casi la mitad, 48% no reciben educación preescolar.
Entre otros hallazgos, el informe incluye que Puerto Rico tiene las tasas más altas de niños cuyos padres no tienen un empleo seguro, el 54%. Además, el por ciento de niños de familias monoparentales son más en Puerto Rico que en cualquier otro estado de Estados Unidos.
El informe también apunta a que un tercio de los estudiantes de escuela superior no se gradúan a tiempo, en comparación con Estados Unidos, donde un cuarto se tarda más de lo programado.
Para la analista de investigación Senior del Consejo Nacional de la Raza, Nayda Rivera, 'la buena noticia es que la tasa de natalidad en adolescentes en Puerto Rico continúa con una tendencia negativa y hay menos niños hoy que carecen de seguro de salud'.
'Pero cuando una gran mayoría de nuestros niños viven en zonas de alta pobreza, en familias monoparentales, y con los padres que carecen de un empleo seguro, no podemos ignorar las amenazas a su bienestar. Debemos dirigir nuestros recursos limitados para mejorar las perspectivas de nuestros hijos y ayudarlos a prepararse para el futuro', añadió.
El libro 2012 Kids Count cuenta con los datos más actualizados sobre las condiciones de vida y bienestar de la niñez en Estados Unidos.