El Departamento de Justicia federal y la Agencia Federal de Protección Ambiental (EPA) demandaron al municipio de Santa Isabel para que cumplan con un plan de cierre de vertedero que se supone hubiera completado en 2010.

La acción presentada en el Tribunal Federal el miércoles pasado consigna que el municipio ya no está aceptando depósitos de desperdicios en el vertedero, pero, por supuestos problemas económicos, no ha completado el proceso de cierre, no ha implantado programas de reciclaje y no ha realizado esfuerzos de mitigación para que los materiales depositados no afecten el Acuífero del Sur.

La acción de la EPA contra Santa Isabel ilustra el historial de fallos que ha tenido la agencia federal en el manejo de los vertederos ya que, como ha sucedido en otros municipios, la agencia lleva años tratando de que Santa Isabel cumpla con acuerdos de cierre de su vertedero.

En Puerto Rico hay 29 vertederos que necesitan acción por los peligros ambientales que representan, 12 de ellos están bajo supuesto control de la EPA y Santa Isabel era uno de ellos. Tan reciente como en septiembre de 2016, la agencia federal anunció acuerdos con Cayey y Arroyo para el cierre de sus vertederos y la instauración de programas de reciclaje.

En el caso de Santa Isabel, la agencia indicó al tribunal que el vertedero está operando desde 1979 y desde 2007 están bajo intervención de la agencia. El vertedero está ubicado sobre uno de los acuíferos del sistema del Acuífero del Sur y está localizado cerca de un pozo que usa la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados. Además, los desperdicios que permanecen expuestos son foco del mosquito que propaga el Zika.

Este municipio está en incumplimiento con la EPA desde 2013, cuando se supone que completara el cierre, y desde el 2014, cuando dejó de dar informes de progreso a la agencia.