Mi gato puede ser diabético?
El incremento mundial y en nuestro país de casos de diabetes en los últimos años nos alarma, y nos deja pensando acerca de las medidas que debemos considerar para nuestra salud y para la salud de nuestros seres queridos. Nuestras mascotas no escapan a este riesgo, sufriendo enfermedades similares a las que sufrimos nosotros los seres humanos, como es el caso de la Diabetes.
La diabetes Mellitus, casi siempre es insulino-dependiente cuando está presente en nuestras mascotas. En nuestra práctica, la mayor cantidad de animales diabéticos son gatos.
Aunque no hay una edad específica, por lo general se presenta en adultos. Historial de gatos que beben más agua de lo normal, orina mayor cantidad y más frecuente a lo usual, aumento del apetito acompañado con pérdida de peso, nos debe llamar la atención e inmediatamente asistir a la consulta de nuestro médico veterinario licenciado, para poder evaluarlo y realizar pruebas que busquen descartar o diagnosticar esta posibilidad.
Aunque por definición, el azúcar elevada debe estar presente en la sangre y ser detectada en la orina para diagnosticar la Diabetes Mellitus, algunas veces es difícil obtener resultados concretos. Hay que hacer diferentes pruebas, una evaluación física completa, revisando el impacto sobre todo a nivel del sistema nervioso del paciente (en sus patas traseras y visión), y realizar sucesivas Curvas de Glucosa (medición a intervalos de tiempo del azúcar en sangre para definir el comportamiento de ésta en el animal y decidir el adecuado tratamiento con insulina). Los cambios de dietas son vitales para controlar el azúcar en sangre, requiriendo dietas altas en fibra con menor cantidad de carbohidratos.
Aún iniciando el tratamiento con insulina, por lo general, la mascota debe asistir varias veces a la clínica a realizarse Curvas de Glucosa hasta que se ajusta la dosis, se regulariza el azúcar en la sangre del animal, y el paciente normaliza su comportamiento dejando de manifestar los signos clínicos.
Cuando la diabetes se descontrola, el paciente incurre en una compleja condición que se llama ketoacidosis, que puede llegar a ser una emergencia veterinaria si no se atiende a tiempo, y que incluso le puede causar la muerte a nuestra mascota.
Un gato con diabetes, una vez controlada su condición, puede tener una vida larga, plena y tranquila. Siempre y cuando tenga la oportunidad de tener un dueño preocupado y con los recursos, que le asista y provea de sus medicamentos, se los administre diariamente y esté pendiente de sus revisiones periódicas para poder constatar que la condición está controlada.
*Puede contactar al Dr. Sosa a través de hospitalparamascotas.com; Hospital Para Mascotas en Facebook; hparamascotas@gmail.com; o el 787-292-0455.