'Los peloteros de Puerto Rico!': Homenaje a los muchachos en el Bithorn
Frente a más de una veintena de niños que muy bien pudieran ser el futuro de la pelota nacional, Edwin Rodríguez, Carlos Delgado, Wicho Figueroa y Ángel Pagán parecían trasladarse al pasado.
Bueno, no a la era prehistórica, pero sí a nueve meses atrás, cuando le dieron a Puerto Rico uno de los triunfos más grandes en la rica historia del beisbol.
'Mano, de todos los países del mundo donde se juega el béisbol al más alto nivel, mano, de todos esos países nosotros llegamos segundos. Somos subcampeones mundiales!', dijo Delgado, en las afueras del estadio Hiram Bithorn, donde el Municipio de San Juan presentó una tarja conmemorativa que reconoce la gesta lograda por el equipo nacional en el pasado Clásico Mundial de Béisbol.
En ese torneo, los peloteros boricuas unieron por varios días a un pueblo que ya anda tan aquejado por la crisis socioeconómica. Si hubiese que escoger al héroe deportivo de 2013, al que alivianó la carga emocional de los puertorriqueños como Tito Trinidad lo hacía a finales del Siglo XX, pues habría que escoger a este equipo, que aunque perdió el campeonato ante República Dominicana en la final, infló el pecho de toda una nación y devolvió la esperanza en el béisbol puertorriqueño.
'Hay tantas personas a las que yo tengo que agradecer', puntualizó el dirigente Rodríguez. 'Está Delgado, que fue el primero que yo llamé. Están todos los coaches, Carlos Baerga, Juan ‘Porky' López, Cheo Rosado, Ricky Bones, Tony Valentín, Josué Espada… Y pues claro! Los héroes de todo esto! Mis jugadores! Los peloteros de Puerto Rico!', apostilló.
A la ceremonia donde el administrador del Municipio de San Juan, Andrés García Martinó, develó la tarja, asistieron los peloteros Pagán, Figueroa, Irving Falú, Pedro Valdés, Machete Maldonado, Motorita Feliciano, Hiram Burgos, José De la torre, Andrew Santiago y el eterno ‘bat boy' de Puerto Rico, Lou Brock.
El ‘coach' Rodríguez andaba con exceso de alegría con una sonrisa más grande que el propio estadio Hiram Bithorn. Bromeó de sobra, apodando a Pagán con el mote del 'Caballo Loco', llamando a Pedro Valdés 'el eterno novato' y alabando la gestión en la pelota invernal boricua de Motorita Feliciano, 'a quien le falta solamente un 'hit' para llegar a los 500'.
'Hay veces que perdiendo se gana', dijo mientras tanto Pagán cuando le tocó el turno al micrófono, en obvia alusión al juego final ante Quisqueya.
'Y ya mismo les toca a ustedes. Queremos que estén listos!', agregó el estelar jugador de los Gigantes de San Francisco, mientras miraba las caras sonrientes de los peloteritos allí presentes, parte de un equipo de la Liga Willie Ronda.
La ceremonia se realizó en el marco del 50 aniversario del Bithorn. La tarja expresa en su propósito: 'resaltar el éxito de un equipo que unió a todos los boricuas y nos inspiró a vencer toda adversidad en la consecución de nuestros objetivos como patria'. En la placa de mármol quedaron incluidos los nombres de los 29 jugadores, los siete miembros del equipo técnico y el del dirigente Edwin Rodríguez.
La gran ausente en la ceremonia fue la alcaldesa Carmen Yulín Cruz, a quien no pudimos preguntarle en ese entonces qué pensaba de la situación con el sistema de retiro de la clase magisterial. Fue representada por el director de la Oficina de Recreación y Deportes del Municipio, Pedro Rojas.