El reciente acuerdo en el Congreso que permite un presupuesto de $1,012 billones asigna $572,000 millones para el gasto militar, incluidos $92,900 millones para la compra de nuevas armas.

Los demócratas y los republicanos de ambas cámaras del Congreso se pusieron de acuerdo anoche en un pacto que aleja la amenaza de otra suspensión de actividades de la Administración federal, como la ocurrida en octubre pasado.

Ambos partidos están ahora con la mira puesta en las elecciones que en noviembre renovarán un tercio del Senado y la totalidad de la Cámara de Representantes.

La autorización temporal de fondos para el funcionamiento del gobierno, aprobada en octubre, expira el miércoles a medianoche pero, debido a las reglas parlamentarias, no se espera que el acuerdo presupuestario sea aprobado antes de esa hora.

Por ello se espera que ambas cámaras aprueben otra medida provisional por tres días lo cual llevará hasta el sábado el plazo para la aprobación definitiva del acuerdo presupuestario.

El acuerdo da al Pentágono otros $63,000 millones para proyectos de investigación y desarrollo.

El gobierno del presidente Barack Obama había pedido $99,300 millones para compras de armamento y $67,500 millones para investigación y desarrollo.

Del total asignado para el gasto militar $487,000 millones van para el presupuesto básico y otros $85,000 millones se han asignado para las operaciones en ultramar, que incluyen la menguante presencia estadounidense en el conflicto de Afganistán.

La asignación es $5,000 millones mayor que lo solicitado por la Casa Blanca.

En el área de adquisiciones los legisladores se pusieron de acuerdo en una asignación de más de $6,000 millones para el programa de los submarinos clase Virginia y unos $2,000 millones para el destructor DDG-51.

La Marina de Guerra también contará con más de $900 millones para su programa de reemplazo de portaaviones, y $1,800 millones para su programa de embarcaciones de combate en litorales.

La Fuerza Aérea recibirá $10,300 millones para la compra de aviones y $4,400 millones para la adquisición de misiles.

Por su parte, el Ejército recibirá $1,600 millones para la compra de vehículos terrestres, $4,800 millones para comprar aviones, $1,500 millones para misiles y $1,400 millones para munición.