No hace falta irse para que un buen producto deslumbre a clientes e inversionistas
No fue casualidad que el puertorriqueño Norman Ortiz Martínez produjera la primera y única aplicación que le permite a las personas, sin conocimiento en programación, crear y publicar sus propias aplicaciones a traves de su celular. Requirió investigación, meses de negociación con Apple y una inversión de $150,000. Su convencimiento por la calidad y originalidad del producto, sin embargo, hicieron que el empresario perseverara y apostara por el crecimiento del negocio incipiente en la isla.
El ingeniero, intrigado por el mundo de la tecnología, estaba buscando una herramienta para desarrollar una aplicación por su cuenta, cuando se percató de la dificultad del proceso. 'No encontraba nada en aquella época que fuera fácil de usar para desarrollar aplicaciones. Era bien complicado tener que aprender un nuevo lenguaje como iOS o Java, que es el lenguaje de Android', comentó sobre sus inicios.
La curiosidad lo llevó a la investigación y de la investigación, descubrió caminos que aún no habían sido recorridos en el mundo tecnológico. Así nació iGen Apps, una compañía con la misión de proveerle a las pequeñas empresas e individuos una manera fácil y asequible para crear sus propias aplicaciones móviles.
Sin ningún tipo de promoción, en tan sólo meses del lanzamiento, unas 10,000 personas habían bajado el producto en 116 países. Compañías e individuos hasta en Japón, Australia, Inglaterra y África se habían interesado por la aplicación desarrollada en Puerto Rico.
'Queremos que sean miles y millones de personas las que nos descubran y utilicen. Me apasiona esto, me apasiona ver los ‘emails' de las personas diciéndome ‘tú tienes un producto tremendo, quiero enseñarlo a mis estudiantes'', contó el hombre de 37 años.
A pesar de la crisis económica que atraviesa la isla, Ortiz Martínez optó por quedarse en el país para establecer su negocio, ya que encontró que mecas tecnológicas como Silicon Valley estaban saturados y se hacía difícil conseguir inversionistas. En cambio, con un buen producto y trayectoria, los inversionistas pueden contactarte desde cualquier lugar del mundo. Ya sea en Puerto Rico, San Francisco o en China, para sobresalir en esta industria basta una idea y una laptop. 'Se puede lograr en cualquier lugar del mundo', puntualizó el ingeniero.
La mayor dificultad que enfrentó en el proceso fue cuando Apple le denegó el permiso para desarrollar la aplicación para iOS. Tras seis meses de negociación, la compañía logró superar esa barrera, y se encuentra, actualmente, en una fase de reconstrucción de su infraestructura y diseño.
'Si yo no estuviera tan seguro de que hay mucha gente que necesita este tipo de soluciones, yo no estaría todavía haciéndola. Vi que hay una necesidad, no sólo en Puerto Rico y Estados Unidos, sino mundial, de gente que está buscando hacer aplicaciones para su negocio, amigos, comunidad, bandas musicales o preferencias que tengan', finalizó el empresario.
(Juan Costa para NotiCel)
Nota del Editor: Parte de la serie de historias de Navidad de NotiCel en alianza con Telemundo Me quedo aquí, dedicada a todo@s aquell@s boricuas profesionales y emprendedores, que pudiéndose ir al exterior a buscar mejor suerte en medio de la recesión económica han decidido quedarse en Puerto Rico y aportar al resurgimiento del país. Sigue la serie aquí y en las ediciones de las 5:00 pm de Telenoticias en Telemundo.