Japón se convierte en asexual por el 'síndrome del celibato'
Japón tiene una de las tasas más bajas de natalidad en el mundo. Su población de 126 millones disminuye desde la pasada decada, y se proyecta que siga descendiendo hasta el 2060. Además, el panorama no parece mejorar puesto que el índice de personas solteras ha alcanzado una cifra record. Para el gobierno japones, todo se trata del 'síndrome del celibato'.
Por un lado, una encuesta de la Asociación de Planificación Familiar de Japón (APFJ) mostró que 45% de las mujeres entre 16 a 24 años no estaba interesadas, o incluso rechazaban, cualquier contacto sexual. Y más de un cuarto de los hombres encuestados se expresaron de la misma manera.
Según reseña el diario británico The Guardian, el alarmismo oficial no contribuye a mejorar el 'síndrome del celibato', pero ciertamente, el 2012 fue el año en que menos nacimientos hubo. Portavoces de la APFJ realmente consideran que hay una crisis demográfica en el país, y que la extinción pudiera ser una posibilidad sustancial.
Algunos consideran que la sociedad nipona se encuentra en una transición mayor debido al estancamiento económico, además de batallar contra los efectos psicológicos de una nación afectada por el desastre nuclear producto del gran terremoto de 2011.
Asimismo, la concepción de los roles de acuerdo al género no necesariamente ha variado de los preceptos traidicionales.
Aunque Japón se proyecta una sociedad sexualmente permisiva, aún domina la figura del padre trabajador y proveedor, mientras la madre se queda en la casa atendiendo a la familia. Y aunque las mujeres en el país han demostrado una actitud mucho más independiente y ambiciosa hoy día, lo cierto es que las grandes corporaciones en parte penalizan a las mujeres que deciden procrear una familia. Casi el 70% de las japonesas abandonan su trabajo tras tener el primer hijo.
Más aún, las instituciones gubernamentales ven con malos ojos a las parejas que conciben una familia pero no se casan legalmente. Por otro lado, los varones parecen haber adoptado actitudes más desinteresadas, sin mostrar signos de querer progresar en una carrera para alcanzar cierto estatus social.
La tecnología también ha hecho estragos para contribuir al síndrome con el incremento de la pornografía en línea, las parejas de realidad 'virtual', y hasta las caricaturas animadas. De hecho, no es de extrañar que la mayoría de las amistades jóvenes en Japón mantengan la mayor parte de su relación a través del teléfono inteligente, que sentándose en persona a conversar.
Pero sobre todas las cosas, las estructuras del país están convenientemente diseñadas con muchas faciliades especializadas para individuos. Desde sitios de comida con asientos en fila para sentarse solo, hasta empaques de comida en las tiendas de conveniencia sólo para uno. Incluso, ahora se encuentran cafés exclusivamente para mujeres.
Sin embargo, en otros países de Asia, Europa o América se está dando el fenómeno de que las personas se casen mucho más tarde, o no se casen en lo absoluto. Asimismo, los índices de natalidad disminuyen y las viviendas unipersonales aumentan.