EE.UU. cederá el control del 'listín telefónico' de internet
Washington - En octubre, la Internet Corporation for Assigned Names and Numbers (ICANN), la organización sin ánimo de lucro que controla los registros de direcciones de internet, dejará de operar bajo el paraguas del Gobierno de EE.UU., algo que los republicanos consideran un riesgo para la libertad en la red.
En los inicios de internet y hasta su muerte en 1998, Jon Postel, un barbudo científico californiano con apariencia de monje y conocido como el 'dios de la red' inventó el protocolo que permite transitar las autopistas 'world wide web'.
Un mes antes de su fallecimiento, EE.UU. creó la ICANN, la autoridad que administra las direcciones numéricas únicas detrás de cada sitio online en la red, una especie de listín universal que se ha mantenido desde el nacimiento de internet como lo concebió Postel.
ICANN ha operado desde sus comienzos bajo un contrato con el Departamento de Comercio de EE.UU., pero de manera independiente, como garante de que una dirección web pueda ser visitada en todo el mundo, gestor de los protocolos detrás de ese simple gesto o como interlocutor para nacimientos de nuevo dominios, como el '.cat' catalán.
Desde octubre, ese contrato no volverá a renovarse, desvinculando definitivamente a la ICANN del Gobierno estadounidense, algo que ha elevado los temores sobre si naciones como China, que mantiene un férreo control de la red de redes, puedan ahora intervenir en la libertad del internet global.
Algunos senadores republicanos han iniciado una campaña para evitar por medio de una legislación de emergencia que la ICANN deje de estar vinculada a Estados Unidos.
Si eso ocurre, asegura una campaña liderada por el senador ultraconservador Ted Cruz, 'países como Rusia, China o Irán podrán censurar las libertad de expresión en internet, incluido en Estados Unidos, al poder bloquear los dominios que no le gustan'. Cruz va más allá y considera que la transferencia del control del registro de internet a la ICANN sin que medie contrato con el Gobierno estadounidense puede afectar a la seguridad nacional estadounidense.
Pese a ser adalides de la menor intervención del Gobierno, en esta ocasión Cruz y otros republicanos han retrasado con bloqueos de fondos en el Congreso la transferencia de poder a la ICANN.
En entrevista con el diario Político esta semana el presidente de la Administración Nacional de Telecomunicaciones (NTIA) pedía a los republicanos no poner más obstáculos a la transferencia de poder. 'Es importante para el futuro de internet que la transición no se bloquee, eso sería como ayudar a Rusia y China', aseveraba Larry Strickling, que encabeza la agencia del Departamento de Comercio con el vínculo contractual con la ICANN que está apunto de cesar.
En un principio países como Rusia, Brasil o India abogaron por que las competencias de la ICANN, creada durante la Presidencia de Bill Clinton, pasaran a la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), una organización dependiente de Naciones Unidas mucho más burocratizada y dependiente de equilibrios geopolíticos.
Los expertos no comparten la opinión de senadores como Cruz o Marco Rubio y en todo caso consideran que la ICANN, participada por técnicos de 163 países de todo el mundo, tendrá aún más independencia de Gobiernos al tener una multiplicidad de accionistas más sólida.
En un artículo de opinión esta semana, Andrew Sullivan, presidente del Internet Architecture Board (IAB), organización asesora encargada de asegurar la independencia e innovación en internet, explicaba que Estados Unidos no está entregando a otros el control sobre internet. Esas funciones 'serán llevadas a cabo como todo en internet, a través de colaboración de las partes interesadas (la mayoría de ellas del sector privado)', señala el artículo, publicado por TechCrunch.
Patronales de empresarios y el sector privado, incluida la plana mayor tecnológica (Google, Facebook, Amazon, Microsoft), han apoyado la transición a la ICANN, cuyas competencias no se deberían verse intervenidas por ningún Gobierno una vez se materialice la transición.
La ICANN tampoco tiene capacidad de decisión sobre qué tipos de direcciones de internet son bloqueados por distribuir contenido ilegal, aunque sí establece los protocolos en el caso de que autoridades judiciales decidan bloquear un dominio.
El fin del apadrinamiento estadounidense de la ICANN entregará el control al sector tecnológico y a expertos de todo el mundo. Si la transición se realiza como está previsto, ningún internauta se percatará del cambio y la red seguirá funcionando como hasta ahora.