La contralora Yesmín Valdivieso dijo el martes que es inconstitucional usar fondos y recursos públicos para manifestaciones y protestas, esto luego que la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, confirmara que se usaron recursos del municipio para las manifestaciones en contra de la Junta de Control Fiscal.

'Yo entiendo que no. La posición de la oficina (de la contralora) es que no. Que no se puede. No se debe ni se puede. Los fondos públicos están para hacer la labor que ayude a los residentes de un municipio, a los residentes de Puerto Rico. Pero no, no, no, no. No se puede', dijo Valdivieso enérgicamente en una entrevista radial (WKAQ).

El lunes, la alcaldesa capitalina explicó el rol que tiene el Municipio de San Juan en apoyo a las protestas contra la Junta de Control Fiscal y aseguró que tiene el visto bueno de la Legislatura Municipal. Detalló que el municipio es miembro de una concertación y que está avalado por la Asamblea Municipal para utilizar recursos municipales para apoyar movimientos como estos.

'Eso no puede ser. Entonces después nos preguntamos por qué es que tenemos una Junta? Porque no hemos sabido hacer las cosas bien. Entonces la politiquería se mete y entonces, cómo yo me realzo al frente de todo el mundo para ser buena No. No está bien y nuestra oficina seguirá señalando las cosas que están mal, tengan la aprobación de la Legislatura Municipal o no. Sí, eso es un permiso. Fantástico. Pero eso no quiere decir que la Legislatura Municipal pueda decir eso o que esté correcto o que esté bien', explicó Valdivieso.

'No podemos seguir viviendo así. No podemos vivir en un país de tira piedras o tira botellas de agua y entonces avalar y pagar con fondos públicos, cuando el gobierno y su política pública se ha determinado que no han podido arreglar este revolú y el gobierno de Estados Unidos, que sí tiene poderes sobre nosotros, ha determinado que una Junta nos puede ayudar, al igual que toda esta politiquería con el caso de Anaudi y el caso de la Superintendencia (del Capitolio). Son casos iguales y son diferentes. En vez de usarlos para decir: ‘ay Dios mío, estas cosas no las podemos hacer, las usamos pa decir ah no, que aquel lo hizo peor', dijo Valdivieso, quien insistió que en el país hay corrupción en todos los niveles.

El aspirante al Senado por San Juan, Henry Neumann Zayas, exigió el martes a la alcaldesa que desista del uso de fondos públicos para financiar campamentos y protestas contra la Junta de Control Fiscal.

'La alcaldesa en lugar de invertir fondos para generar desarrollo económico y empleos, contrata a sus amigos activistas y le suple alimentos y recursos a los socialistas para que protesten como lo hicieron ayer (lunes) en Walmart y la pasada semana en el Condado Plaza', criticó Neumann Zayas en un parte de prensa.

'No hay un fin público en el uso de esos fondos. La Alcaldesa no tiene un mandato del pueblo para gastar fondos públicos para combatir la Junta de Control Fiscal', afirmó.

Por su parte, el candidato a Representante por el Partido Nuevo Progresista en el Precinto 4 de San Juan , Víctor Parés Otero , catalogó como inaceptable el gasto que la alcaldesa admitió haber incurrido.

El líder novoprogresista cuestionó su negativa a contestarle a la prensa si también está subvencionando el campamento en contra de la mencionada estructura federal, que lleva desde hace varios meses instalado frente al Tribunal Federal en la Avenida Chardón.

'En momentos en que el Municipio de San Juan está funcionando con un superávit ficticio, producto de préstamos por más de $309 millones del Banco Gubernamental de Fomento, resulta sumamente cuestionable tanto la acción de la Legislatura Municipal de San Juan, como de la alcaldesa Cruz Soto, de autorizar y desembolsar miles de dólares para este tipo de actividades, que no se traducen en beneficio alguno para el pueblo. La posición de la alcaldesa, en contra o favor de cualquier organismo federal o estatal, no puede ser justificación para derrochar el dinero de los sanjuaneros,' sostuvo Parés Otero.

Finalmente, Parés Otero aseguró que 'todo el mundo sabe que las movidas de la alcaldesa de San Juan con relación a este asunto, así como las contrataciones de supuestos líderes cívicos o comunitarios a última hora, no son más que burdos intentos de comprar votos, pagando sueldos y actividades con fondos públicos. Es lamentable, porque opera con un superávit ficticio, pero lo malgasta como si fuera legítimo. Esta forma de gobernar es inaceptable, y le hace mucho daño a la ya maltrecha economía de la Ciudad Capital.'