Denuncian caos en condominio Hillview Trujillo Alto (galería)
Desde hace cuatro años, los vecinos del condominio Hillview viven un infierno ante la ruina en que se ha convertido la estructura que alberga sus hogares, por los vicios de construcción que atentan contra la vida, la seguridad y la salud de sus residentes ya que el desarrollador, Builders Group and Development Corp. y su presidente, Jorge Ríos Pulpeiro, los ha abandonado a su suerte.
Ríos Pulpeiro aún tiene a su cargo la administración del condominio, que consta de 163 apartamentos distribuidos en 12 niveles, de los cuales sólo alrededor de 60 fueron vendidos.
La mayoría de los titulares los adquirieron aprovechando el incentivo creado con la Ley 197 de 14 de diciembre 2007, que concedía un crédito contributivo de hasta $25,000 para la compra de unidades de vivienda nueva.
Hillview Condominium se anunció en varios periódicos del País desde febrero 2007 al 2009. Este complejo de apartamentos - mercadeado como nuevo, aunque se construyó en el 1970 - ofrecía entre sus facilidades: casa-club, piscina, gimnasio, área verdes recreacionales y apartamentos con finas terminaciones.
Sin embargo, los residentes no han podido disfrutar de los mismos, ya que: no tienen acceso a la casa-club, la piscina carece de permisos de uso, el gimnasio nunca fue habilitado, el pasto se ha apoderado de las áreas verdes y la estructura adolece de vicios de construcción.
Entre los reclamos de los residentes de Hillview se encuentran los siguientes: ninguno de los tres elevadores funciona, ni poseen certificaciones vigentes; las escaleras de escape necesitan luces de emergencia; tanto la alarma de fuego como el sistema de bomba de incendio están averiados.
También la piscina está falta de mantenimiento - convirtiéndose en criadero de mosquitos y sapos. Además, hay una plaga de comején y grietas en la estructura. Como si fuera poco, el edificio está amenazado por significativas filtraciones de agua por las paredes y juntas entre las paredes, en gran parte de los apartamentos.
Las condiciones mencionadas han provocado un estado de ruina funcional. Debido al efecto estructuralmente dañino que tienen las filtraciones de agua sobre las varillas de refuerzo de las paredes y losas de concreto, se producirá, dentro de un plazo de seis a nueve años, una condición de amenaza de ruina en la estructura, según se desprende del informe pericial preparado por la firma de ingenieros Civil Engineers <><><><><><><><><><><><><><>& Structural Consultants./p
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pEl suplicio de los titulares se ha hecho cada vez mayor, pues han realizado esfuerzos infructuosos en las agencias gubernamentales pertinentes, muchas de las cuales le han hecho caso omiso a las múltiples querellas./p
pUn grupo de titulares entabló una demanda en contra de Builders Group and Development en el Tribunal de Carolina y otro grupo hizo lo propio en el Departamento de Asuntos al Consumidor (DACO). Ya varios residentes, quienes han llevado acciones legales individuales en contra del desarrollador, han logrado sendos fallos a su favor. No obstante, aun no han logrado hacer cumplir las sentencias que ordenan al demandado a saldar el balance del préstamo hipotecario, reembolsar los pagos incurridos a la hipoteca, cubrir los honorarios de abogado, entre otros./p
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pemWaleska Torres Toro, residente y portavoz./em/p
pAl menos el alcalde de Trujillo Alto, José Luis Cruz, les ha ayudado con el recogido de basura y ha hecho gestiones para tratar de evitar que les corten la luz en las áreas comunes. Esto se debe a que el condominio está expuesto a quedarse sin energía eléctrica pues Doral Bank, institución bancaria que otorgó el préstamo de construcción al desarrollador, se había comprometido en el Tribunal a poner el servicio a su nombre y continuar pagando; sin embargo, deben sobre $8,000.00 a la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).
Anteriormente, Builders Group and Development Corp. tenía una deuda con la AEE de sobre $70,000 relacionada el servicio eléctrico de Hillview. En esa ocasión, el Tribunal dividió el balance a partes iguales entre el desarrollador, Doral Bank y los residentes.
Los vecinos de Hillview pagaron una tercera parte de ese balance, aunque no estaban obligados en ley, pues la administración del complejo la tiene Ríos Pulpeiro ya que no ha vendido la cantidad de unidades necesarias para pasar la administración a los titulares.
Hoy, las familias que aun habitan en Hillview, nuevamente se ven amenazadas de quedarse a oscuras.