Al igual que los turistas pasaron decepcionados frente al Castillo San Felipe del Morro o el San Cristóbal sin poder entrar, los turistas en los lugares históricos de Washington han tenido que regresar de igual modo. Sin embargo, un grupo de veteranos que querían rendir homenaje a sus compañeros no dieron su brazo a torcer, tal como los congresistas no pudieron dar su brazo a torcer para resolver el presupuesto federal y evitar el cierre del gobierno.

Según reseñara el diario The Washington Post, varios veteranos del Regimiento 65 de Infantería deseaban rendir homenaje a sus compañeros caídos en el Monumento de la Guerra de Korea.

Aunque personal del Servicio de Parques federal le indicó a los ancianos que los monumentos estaban cerrados debido al cierre del gobierno, al darles la espalda, los veteranos que así podían separararon las vallas que impedían el acceso para que se acercara el grupo.

Según se justificó con una sonrisa Anthony Mele, miembro de la fuerza de honor del regimiento, el grupo entendió que el miembro de Servicio de Parques indicó que los permisos para entrar estaban anulados, a excepción del de ellos.

Después de todo, es bastante difícil negarle el acceso a un grupo de héroes veteranos, en una etapa de sus vidas en que no necesariamente tendrán una segunda oportunidad para volver a visitar el monumento.

Otro veterano, Thomas López de 84 años, admitió sentirse honrado de poder dar este homenaje a sus compañeros, aunque también sentía vergüenza de que estuviera sucediendo un cierre de gobierno que a su parecer es innecesario.