EEUU preocupado ante posibles 'provocaciones' de Corea del Norte
El subsecretario de Estado de EE.UU., William Burns, expresó hoy en Seúl la 'preocupación' de su Gobierno por los últimos cambios políticos en Corea del Norte y la posibilidad de que el país comunista lleve a cabo nuevas 'provocaciones'.
Estados Unidos y Corea del Sur 'comparten muchas preocupaciones sobre el reciente comportamiento del liderazgo' de Corea del Norte, indicó a los medios Burns, tras reunirse en la capital surcoreana con el primer viceministro de Exteriores de Seúl, Kim Kyou-hyun.
El funcionario estadounidense advirtió de que existe el peligro de que Pyongyang adopte una conducta 'imprudente' en el futuro, lo que podría dar lugar a 'provocaciones', en referencia a alguna acción militar u otro tipo de hostilidades del régimen de Kim Jong-un contra Seúl y Washington.
Burns, que llegó la noche del lunes a Corea del Sur, continuará hoy su gira asiática que también le llevará a China y Japón.
Corea del Norte vivió su mayor cambio político en dos años el pasado diciembre, cuando el régimen ejecutó a Jang Song-thaek, tío de Kim Jong-un y considerado por expertos el segundo político más influyente del país después del joven líder.
En los últimos días Pyongyang ha formulado con insistencia la propuesta de iniciar una etapa de paz y distensión en la península coreana a cambio de que Estados Unidos y Corea del Sur cancelen los ejercicios militares Key Resolve y Foal Eagle, programados para finales de febrero, marzo y abril.
Seúl y Washington, que ya han confirmado que seguirán adelante con las maniobras, sospechan que Corea del Norte podría estar tratando de justificar futuras hostilidades, ya que es consciente de que los aliados nunca aceptarían cancelar sus ejercicios anuales de defensa.
Por otra parte, William Burns reiteró el deseo de Estados Unidos de que se reinicien las conversaciones orientadas a garantizar la ausencia de armas nucleares en la península coreana.
Este proceso está actualmente estancado, ya que Corea del Norte exige regresar a la mesa de diálogo sin condiciones previas pero EE.UU. insiste en que el régimen de Kim Jong-un debe demostrar con acciones su voluntad de abandonar las armas nucleares antes de sentarse a negociar.