El cantante Bryant Myers, quien ha sido tildado anteriormente de 'Mama's Boy', logró escaparse de sus secuestradores en la tarde de ayer, tirándose del carro en el que lo transportaban entremedio de un escarceo con la policia.

Tras el evento, Myers habría salido de la isla para 'atender compromisos profesionales' según su abogado, dejando a la mujer sola en la isla.

El agente Ángel Resto confirmó a NotiCel que aún no se ha arrestado a ningún implicado en este caso y que el cantante terminó con unas heridas en sus rodillas, debido a la caída en el intento de escape.

De la investigación inicial se desprende que cuatro hombres interceptaron al cantante en la calle Roca, frente a la cancha, y tres de ellos lo forzaron a entrar en la Kia. La mamá, que estaba en medio del suceso, se quedó en la BMW con el cuarto implicado. En un momento dado de la persecución, el conductor de la BMW dejó a la mujer en el auto cerca del vertedero y huyó a pie por la maleza. Despues de que Bryant Myers logró escapar, los tres sujetos huyeron en el vehículo blanco y aún no se ha dado con su paradero.

Según Resto la guagua Kia utilizada por los secuestradores fue hallada calcinada en la parte trasera del negocio 'Aquí me quedo' en Piñones y el FBI se quedó con ella.

El vehículo, dijo, había sido robado en la madrugada del lunes a una mujer en el barrio Palma Sola, en Canóvanas.

Aún no se ha determinado quien asumirá la total jurisdicción en este caso.

Cuando secuestraron a Myers, la cancha de Loma Alta, en Carolina, estaba llena de gente.

Aún era de día y una de las personas que se dio cuenta de lo que estaba sucediendo, decidió perseguir la guagua Kia Sportage color blanca, en donde tres raptores montaron al cantante, y la BMW negra, en donde iba un tercer maleante con la madre del artista, identificada como María Perez Díaz. En medio de la persecución, el testigo llamó al servicio de emergencia 911 para informar lo sucedido y, de paso, ir dando información de la ruta por donde iban los secuestradores.

'En los eventos desafortunados del martes, hay que dar gracias a Dios, porque un buen samaritano arriesgó su vida y siguió los carros de los malhechores, dando la oportunidad a la Policía Municipal de dar búsqueda de esa vehículo de motor', dijo a NotiCel el licenciado Edwin Prado, abogado de Myers.

'Alguien se arriesgó y puso su vida en peligro al seguir a estas personas, a pesar de que llevaban armas largas. Y esa misma persona fue dando parte a la Policía por el 911, pudiendo la Policía Municipal de Carolina encontrarlo. La Policía Municipal hizo un excelente trabajo, dio frente a estas personas, hubo intercambio de disparos e hicieron todo lo posible para que no fuera un final escabroso', expuso el licenciado.

'Es lamentablemente que esto este sucediendo en Puerto Rico. Fue un secuestro a plena luz del día y frente a un sinnúmero de personas que estaban jugando baloncesto en la cancha. Y estos sujetos entran así porque sí, como su estuvieran en la sala de su casa', expresó Prado.

El abogado dijo que la progenitora del cantante está tranquila, aún lidiando con el shock de la situación, mientras que el cantante urbano ya se encuentra fuera del país, cumpliendo con unos compromisos profesionales.

'Él acababa de llegar de una gira y ya tenía unos compromisos en agenda, así que se fue para estar tranquilo. Su equipo de manejo ya está trabajando para reforzar su seguridad', detalló.

Prado no quiso entrar en detalles sobre la investigación y la información que ha trascendido de que se pedía una recompensa por su captura. Sin embargo, opinó que el cuarteto no tenía mucha experiencia criminal, por la manera como manejó el asunto.

'Esto te lo digo yo, como abogado criminalista con experiencia, unas personas que se dedican a esto, son más organizadas y lo hubiesen estudiado mejor, habrían sido más cautelosos y no hubiesen fallado', dijo.

'Al final todo salió bien y el está afectado, porque nadie puede pensar que su fama ponga en riesgo a su familia. Aquí no era el nada más, la mamá estuvo de por medio y no tuvieron más remedio que llevársela porque, como cualquier madre, no iba a dejar que se llevaran a su hijo', añadió.

La División de Crímenes Violentos del Negociado Federal de Investigaciones (FBI) trabaja el caso en conjunto con el CIC de Carolina.