Europa y Asia reaccionan a la victoria de Trump
Algunos gobiernos convocaron reuniones de emergencia. Facciones derechistas celebran abiertamente, y otros felicitan al republicano Donald Trump entre la incredulidad y la timidez tras su victoria en los comicios presidenciales de Estados Unidos.
China confió hoy en poder trabajar con el nuevo Gobierno de Estados Unidos para mantener 'un desarrollo estable y equilibrado' de las relaciones bilaterales y una gestión 'responsable' de los posibles problemas.
'Esperamos que el nuevo Gobierno de EE.UU. pueda trabajar con China' en una cooperación 'que beneficie a los pueblos' de ambos países, afirmó un portavoz del Ministerio chino de Exteriores, Lu Kang, minutos antes de conocerse la victoria del republicano Donald Trump avanzada por los medios estadounidenses.
Preguntado acerca de las amenazas de Trump de desatar una guerra comercial con China, Lu confió en que ambos países puedan gestionar 'de forma responsable' posibles disputas, y aseguró que la relación comercial bilateral 'ha beneficiado a la población estadounidense'.
El portavoz argumentó que en los últimos cuarenta años el valor del comercio bilateral (que en 2015 llegó casi a los 600.000 millones de dólares, con superávit para China, según datos oficiales de Estados Unidos).
'Si surge algún asunto grave entre ambos países, como dos miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) tenemos mecanismos y un marco legal maduros como para solucionarlo de forma responsable', adujo Lu.
Por otro lado, el portavoz chino rehusó contestar directamente a si China da la bienvenida a la posibilidad de que Trump replantee la estrategia de EE.UU. en Asia, y enfatizó que Pekín aboga por que las primeras economías mundiales logren relaciones 'equilibradas y estables'.
'Eso significa que necesitamos trabajar de una forma cooperativa juntos para lograr la paz', añadió, e insistió en que China espera que 'todas las partes puedan compartir nuestras aspiraciones y formar parte de este proceso'.
Mientas, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, felicitó al republicano por su victoria y destacó la importancia del liderazgo de Estados Unidos ante los 'nuevos retos para la seguridad' en el mundo.
'Felicito a Donald Trump por su elección como presidente de los Estados Unidos. Estoy deseando trabajar con el presidente electo Trump', dijo Stoltenberg en una rueda de prensa junto al presidente de la Presidencia de Bosnia-Herzegovina, Bakir Izetbegovic.
'Es importante que los lazos transatlánticos sigan siendo fuertes', agregó.
De otro lado, la ministra francesa de Ecología, Ségolène Royal, afirmó que la victoria en las presidenciales de Estados Unidos de Donald Trump no podrá impedir la entrada en aplicación del acuerdo sobre el cambio climático suscrito en diciembre del pasado año, teniendo en cuenta la marcha de las ratificaciones.
En una entrevista a la emisora 'RTL', Royal recordó que ya son 103 los países que han ratificado ese acuerdo firmado en París en diciembre de 2015, y que representan el 70 % de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Insistió en que Trump, que durante la campaña había avanzado su intención de anular ese tratado al considerar una broma el calentamiento climático, 'no puede impedir' que entre en vigor.
'No puede, en contra de lo que dijo, denunciar el Acuerdo de París', subrayó.
La Presidencia palestina, encabezada por Mahmud Abás, espera que la nueva Administración estadounidense mantenga la línea histórica respecto al conflicto entre israelíes y palestinos y aseguró que seguirá trabajando con Washington para lograr la paz.
'La Autoridad Nacional Palestina (ANP) tratará con cualquier presidente elegido para conseguir una paz justa basada en la solución de dos estados y en el establecimiento de un estado palestino independiente en los territorios ocupados en 1967', declaró en una nota el asesor presidencial palestino Nabil Abu Rudeina.
La Oficina de la Presidencia, por su parte, aseguró que 'todas las administraciones estadounidenses, tanto republicanas como demócratas, han mantenido una sola línea, que es el apoyo a la solución de dos estados, el rechazo a las colonias y el rechazo a la anexión israelí de Jerusalén Este' y mostró su esperanza de que Washington 'no cambie esos principios'.
El ministro de Exteriores, Riyad Al Malki, señaló por su parte que 'el pueblo palestino está muy preocupado con los resultados, especialmente tras las declaraciones de Trump en la campaña', pero afirmó que 'solo se le podrá juzgar por sus posiciones hacia la causa palestina cuando tome posesión en la Casa Blanca'.
El movimiento islamista Hamás, que gobierna en la franja de Gaza, señaló que no espera nada de la nueva Presidencia de EE.UU.
'El pueblo palestino no cuenta en que haya cambios en la política (norte)americana hacia los palestinos porque esta no cambia y está fundada en un sesgo a favor de la ocupación (israelí)', señaló el portavoz del movimiento, Sami Abu Zuhri, en un comunicado.
Por otra parte, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, felicitó aTrump por su victoria y expresó su interés por reforzar las relaciones con ese país, al que consideró un 'socio indispensable'.
'Mi enhorabuena a Donald Trump por su victoria. Seguiremos trabajando para reforzar la relación que nos une a EEUU, socio indispensable', afirma Rajoy en su cuenta en la red social Twitter.
El ministro español de Asuntos Exteriores y Cooperación, Alfonso Dastis, afirmó por su parte que hay unas 'excelentes perspectivas' para consolidar y potenciar las buenas relaciones bilaterales.
'En el sentido de que hay un nuevo interlocutor es una buena noticia. Es la democracia que ha funcionado', declaró el titular de Exteriores en la emisora de radio Cope.
Dastis aseguró que el Gobierno español estaba preparado tanto para el triunfo de Trump como el de la demócrata Hillary Clinton, y está 'deseoso' de consolidar, potenciar y mejorar la 'estrecha relación' que hay con Estados Unidos.
'Es bueno tener un interlocutor, estamos ahora en comienzos de las dos administraciones y hay unas excelentes perspectivas de seguir en la vía ascendente y desarrollo de esta relación', afirmó.
Mientras, la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, dijo hoy que las relaciones entre Estados Unidos y la Unión Europea son más 'profundas' que cualquier cambio político.
'Los lazos entre la Unión Europea (UE) y EEUU son más profundos que cualquier cambio en política. Seguiremos trabajando juntos, redescubriendo la fuerza de Europa', escribió Mogherini en un mensaje de la red social Twitter.
La extrema derecha europea ha sido la primera en reaccionar y con euforia por la victoria del republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
La líder ultraderechista francesa Marine Le Pen felicitó hoy al republicano Donald Trump, incluso antes de que se produjera oficialmente, por su victoria en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, que dijo extender 'al pueblo americano libre'.
'Felicitaciones al nuevo presidente de Estados Unidos Donald Trump y al pueblo americano libre', dice el tuit de felicitación de Marine Le Pen a través de la red social.
Dentro de su partido, el vicepresidente Steeve Briois, en otro tuit consideró que a la vista de lo ocurrido en Estados Unidos, una victoria de Marine Le Pen en Francia en las presidenciales del año próximo también es posible.
'El 95 % de los medios de Estados Unidos hacían campaña contra Trump. Todo el sistema se movilizó contra él', subrayó Briois.
'La elección de Donald Trump es una bofetada a los periodistas y a los 'expertos' del pensamiento único. Una gran esperanza!', añadió.
En el Reino Unido, el líder provisional del eurófobo Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP), Nigel Farage, bromeó hoy sobre la posibilidad de que sea representante del republicano Donald Trump en Bruselas.
'Me va a ofrecer un trabajo? Espero que lo haga. Él va a necesitar a un adecuado embajador euroescéptico en Bruselas para la Unión Europea. Yo preferiría ese trabajo', declaró el político británico en unas declaraciones a la radio de Londres LBC.
Durante la campaña electoral estadounidense, Trump hizo varias referencias a favor del 'brexit' de cara al referéndum europeo celebrado el pasado 23 de junio en el Reino Unido.
Además, Farage, a cargo del UKIP hasta la elección de un nuevo líder, también intervino en la campaña de EEUU al manifestar abiertamente su respaldo a la candidatura del político republicano.
Antes de estas declaraciones, Farage había colocado una frase en tuiter: 'parece que este año va a ser el de dos grandes revoluciones', en referencia al Brexit y a la victoria de Trump en Estados Unidos.
El líder del ultranacionalista Partido Liberal Democrático de Rusia (PLDR), Vladímir Yirinovski, invitó a los periodistas a un copa de champán para celebrar la victoria del republicano Donald Trump.
'Con placer constatamos que en Estados Unidos venció el mejor de los dos candidatos que se sometieron al veredicto de los electores estadounidenses', dijo a la prensa Yirinovski, citado por la agencia Interfax.
El líder del PLDR, una de las cuatro formaciones políticas representadas el Parlamento ruso, opinó que con la llegada de Trump a la Casa Blanca serán levantadas las sanciones adoptadas contra Rusia por su participación en la crisis ucraniana.
El líder del partido de extrema derecha holandés PVV, Geert Wilders, felicitó a Trump por una victoria que consideró 'histórica'.
'Enhorabuena Donald Trump. Tu victoria es histórica y para todos nosotros', dijo Wilders en un mensaje en la red social Twitter.
El líder holandés se refirió a la victoria de Trump como a una 'revolución'.
En Italia, el líder del partido de extrema derecha Liga Norte, Matteo Salvini, afirmó que la victoria de Trump significa 'la revancha del pueblo' contra los banqueros, los especuladores, los sondeos y los periodistas.
'El pueblo gana a los poderes fuertes por 3-0', dijo el líder del partido xenófobo italiano en una entrevista a la emisora oficial de la Liga Norte, Radio Padania.
El político italiano, que aspira a liderar la derecha italiana en unas próximas elecciones, aseguró que después de esta victoria de los conservadores en Estados Unidos y del Brexit (la salida del Reino Unido de la UE) 'es el momento para ser osado'.
La Casa Azul de presidencia de Corea del Sur convocó hoy una sesión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional para evaluar el impacto sobre la situación con Corea del Norte de la posible victoria de Donald Trump en las elecciones de EEUU.
'Vamos a examinar el posible impacto en materia de seguridad de una forma amplia', indicó a Efe un portavoz de la oficina presidencial en Seúl, en un momento en que ya se da por hecha la victoria del candidato republicano.
En sus discursos sobre política exterior, Trump ha expresado su visión de renegociar el acuerdo de seguridad por el cual EEUU garantiza la defensa de Corea del Sur y que considera económicamente poco rentables para el país norteamericano.
En la sesión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional también se evaluará el posible impacto económico de la victoria de Trump en Corea del Sur, según el portavoz.
En este punto, el republicano también ha manifestado en varias ocasiones su intención de renegociar el tratado de libre comercio que EEUU mantiene con Corea del Sur desde 2012 y que considera favorable a los intereses del país asiático y destructor de puestos de trabajo estadounidenses.
Corea del Sur es uno de los países en los que Donald Trump despierta más temores, debido a la dependencia del país de Estados Unidos en materia de defensa frente a una Corea del Norte que avanza cada vez más en su programa de armas nucleares.
La derecha radical de Alternativa para Alemania (AfD), formación en auge en el panorama político alemán, felicitó hoy a Trump y apuntó a que el cambio llegará también a su país.
El éxito de Trump 'es una señal de aviso a todo el establishment', apunta la AfD, a través de su cuenta en Facebook, para expresar su deseo de que acompañen a Trump 'sabias decisiones' y de poder verlo pronto en un primer encuentro con la canciller Angela Merkel.
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, felicitó aTrumpen un mensaje el que abogó por una mejora en las relaciones entre Moscú y Washington.
'En su mensaje, Putin expresó su esperanza de poder trabajar conjuntamente para sacar las relaciones ruso-estadounidense del estado de crisis, así como para resolver problemas de actualidad de la agenda internacional y buscar respuestas a los retos de la seguridad global', informó el Kremlin.
El presidente ruso aseguró que un diálogo constructivo entre Moscú y Washington, basado en la igualdad y el respeto mutuo, responde a los intereses de los pueblos de Rusia y Estados Unidos, y de toda la comunidad mundial.
Sin embargo, la ministra alemana de Defensa, Ursula von der Leyen, admitió hoy haber sentido una 'grave conmoción' por la victoria del candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, para expresar a continuación su respeto por el resultado de las elecciones.
'Ha sido una fuerte conmoción ver cómo se estaba desarrollando la elección', afirmó la titular de Defensa y vicepresidenta de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller Angela Merkel, en unas declaraciones a la televisión pública alemana ARD, para atribuir a continuación esos resultados a un 'voto contra el 'establishment''.
Von der Leyen aludió asimismo al futuro de las relaciones transatlánticas y más concretamente a la de EEUU con sus socios europeos de la OTAN, y afirmó que Trump, ya como presidente, les preguntará con toda probabilidad cuál será su aportación a la Alianza.
'Nosotros también le preguntaremos cuál es su compromiso con la OTAN', afirmó, para asegurar a continuación que la transición entre la actual administración de Barack Obama y la futura de Trump tiene muchas 'incógnitas'.
Pese a ello, Von der Leyen mostró su respeto por el voto de los ciudadanos estadounidenses en lo que ha sido una 'elección libre y democrática'.
Anteriormente, otro representante de la CDU, Nörbert Röttgen, presidente de la comisión de Exteriores del Parlamento (Bundestag), había expresado ya desde la televisión pública su preocupación ante la que ya se percibía como imparable victoria de Trump y dijo que ésta supondrá un 'shock' en las relaciones transatlánticas.