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LifeLink celebra 20 años salvando vidas en Puerto Rico

Como dice la canción; veinte años no son nada. Pero cuando hablamos de una persona a la que sólo le quedan meses, quizás horas de vida, entonces nos parecería demasiado tiempo. Es ese justamente el tiempo que LifeLink de Puerto Rico lleva en la isla ayudando a miles de puertorriqueños, tanto aquí como en los Estados Unidos, a conseguir ese órgano que habrá de salvar sus vidas.

En septiembre de 1994 comenzó operaciones en Puerto Rico esta organización que tiene como compromiso la recuperación de órganos y tejidos para trasplantes. Y cuando decimos compromiso lo decimos porque cuentan con un personal especializado que trabaja 24 horas al día, los 7 días de la semana para suplir esa inminente necesidad de órganos que salven las vidas de aquellos en espera.

Muy pocas personas saben que todos los días mueren sobre 18 personas esperando por un órgano. La lista de personas sobrepasa los 121,000 y todos los días se añaden personas a esa lista. Las estadísticas son claras y reflejan que en los próximos 5 años 1 de cada 10 personas necesitará una terapia de trasplante. Es por eso que LifeLink trabaja ofreciendo educación constante al público en general y a profesionales de la salud.

En Puerto Rico tenemos en espera a más de 450 personas por un riñón y un promedio de 10 esperan por un corazón. Nuestra isla cuenta con 2 centros de trasplante: el Programa de Trasplante de Riñón, el de Riñón/Páncreas y el de Hígado en el Hospital Auxilio Mutuo y el Centro de Trasplante de Corazón en el Centro Cardiovascular de Puerto Rico y el Caribe.

Entendiendo que la educación al público en el tema de la donación es esencial, LifeLink de Puerto Rico ha llevado a cabo varias campañas educativas a través de radio, prensa y televisión. En adición, no desaprovechamos ninguna oportunidad para orientar a grupos de la comunidad, incluyendo escuelas, grupos comunitarios e iglesias, presentando un mensaje claro, consistente y positivo de manera tal que se pueda crear conciencia de que la donación es un acto de amor. Exhortamos continuamente a la discusión del tema en familia.

Ciertamente se ha evidenciado la efectividad de las campañas educativas en Puerto Rico por el número de llamadas para solicitar información, tarjetas de donación, charlas y conferencias en iglesias y comunidades, y por una mayor disposición a consentir al acto de donar órganos y tejidos cuando se da la situación. Sin embargo, es imprescindible que todos colaboremos con LifeLink de Puerto Rico en su misión de educar a la comunidad en el tema de la donación.

Como parte del proceso educativo, LifeLink cuenta con un Programa de Desarrollo de Hospitales, quienes asiste en la implementación de protocolos, en la orientación de todos los profesionales en el proceso de donación, establece contratos, y sobre todo, promueve el clima de estrecha colaboración que debe existir entre el OPO (Organización Recuperadora de Órganos, en el caso de Puerto Rico lo es LifeLink) y el hospital.

La aprobación de la Ley 3005-F (conocida como la Ley de Condición de Participación) en 1998 permitió la total penetración a los hospitales, ya que la ley condiciona la participación de programas de Medicare en la implementación y desarrollo de programas de donación y recuperación de órganos y tejidos. Se trabaja en forma continua en la educación del personal de enfermería y de los facultativos médicos, ya que éstos son el enlace principal entre el donante, su familia y el OPO. Actualmente, las instituciones hospitalarias deben contar con los recursos básicos y el compromiso genuino de sus profesionales para que el proceso de donación se pueda completar efectivamente.

Se han creado comités de donación en varios hospitales y se trabaja en la implementación de éstos en las instituciones que aún no los tienen. Se proveen talleres a enfermeras y médicos en los que se les ofrece educación continua. Además, la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas ha diseñado una electiva dirigida a educar a los futuros médicos en los procesos de donación bajo la tutela de la Dra. Esther Torres, reconocida Gastroenteróloga del país.

Para más información sobre los procesos educativos y la misión de LifeLink puede acceder a: www.lifelinkfound.org o comunicarse al 1-800-558-0977.