Log In


Reset Password
SAN JUAN WEATHER
Tribunales

Dieciséis años después, otros “pivazos” se asoman a un Supremo distinto

Candidata PNP a alcaldía de Aguadilla pidió la intervención del Alto Foro sobre papeletas con voto mixto.

Yanitsia Irizarry Méndez, alcaldesa de Aguadilla.
Foto: Juan R. Costa

La alcaldesa de Aguadilla, y candidata a la reelección por el Partido Nuevo Progresista (PNP), Yanitsia Irizarry Méndez, pidió ayer al Tribunal Supremo que resuelva la controversia sobre la adjudicación de las “papeletas mixtas” y que intervenga en el Escrutinio General de la votación en ese pueblo que se comenzaría hoy en la Comisión Estatal de Elecciones (CEE).

El Supremo declinó entrar en este momento. El juez asociado Erick Kolthoff se inhibió y el juez asociado Edgardo Rivera se unió al bloque de tres jueces nombrados por gobernadores del Partido Popular Democrático (PPD) para crear una situación de empate. Cuatro votos para acoger la solicitud y cuatro votos para no acogerla ahora, por lo que no se acogió.

De haber accedido a la solicitud, hubiera sido la quinta ocasión en la que el Alto Foro interviene en un asunto de envergadura resultante de las primarias o la elección general este año después de la aprobación del nuevo Código Electoral por parte de la mayoría novoprogresista en la legislatura y la gobernadora Wanda Vázquez Garced. Y no hay indicio de que paren las decisiones electorales del Supremo ya que, además de que eventualmente entren en Aguadilla, ayer también el PPD recurrió al tribunal para revocar una determinación del presidente de la CEE, Francisco Rosado Colomer, sobre la forma en que se lleva a cabo el recuento de la papeleta legislativa, una controversia que también podría ser elevada al Supremo.

El caso de Aguadilla tiene un contexto llamativo, ya que se le está pidiendo al tribunal qe interprete la validez de las papeletas con marcas en la insignia de un partido, pero también en la candidatura de candidatos de otros partidos. En 2004, esa fue la controversia definitoria de la candidatura a la gobernación en lo que se llamó el voto “pivazo”. Antes, el Alto Foro estaba dominado por jueces nombrados por gobernadores del PPD, mientras que hoy los jueces nombrados por gobernadores PNP tienen mayoría de 6 a 3.

Hace 16 años, en la papeleta a la gobernación se registraron 6,776 votos que tenían marca bajo la insignia del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), pero también marcas para los candidatos del PPD a la gobernación, Aníbal Acevedo Vilá, y a la comisaría residente, Roberto Prats Palerm. El Tribunal Supremo declaró esos votos válidos, resultando en la victoria de Acevedo Vilá sobre el candidato del PNP, Pedro Rosselló González, por una diferencia de 3,566 votos.

La experiencia quedó marcada con fuego en la memoria política del PNP, al punto de que el Código Electoral de este verano convirtió en inválida esa forma de expresión del elector. Pero, después de las elecciones del 3 de noviembre, se supo que la dilación con la que se aprobó el Código Electoral no permitió que las máquinas de conteo de votos pudieran ser programadas para eliminar esa alternativa, por lo que el mismo PNP aceptó en el seno de la CEE que ese tipo de voto se contara y decidió que no iba a impugnarlos en los tribunales, dejando libre a que cada candidato de la colectividad llevara su caso si así lo necesitaba.

Lo cual nos trae a la solicitud de ayer de Irizarry Méndez.

La candidata presentó su impugnación de estos votos el viernes pasado y la jueza Rebecca de León Ríos citó para vista mañana, miércoles. Pero la CEE le notificó el mismo viernes que el recuento de Aguadilla estaba pautado para comenzar hoy, martes, por lo que la candidata recurrió al Supremo a pedir que declare inválidas esas papeletas y que no se cuenten hoy o, en la alternativa, que el escrutinio prosiga pero dejando aparte “las papeletas municipales del Precinto 35 donde se haya hecho una marca bajo la insignia de un partido pero no se hubiese hecho marca alguna en al menos uno de los candidatos bajo la insignia del partido bajo el cual se hizo la marca original”. De resultar favorecida, lo que busca la candidata es que se reprogramen las máquinas para el recuento o que el recuento se haga manual para poder descartar esos votos sin estar sujetos a la programación de las máquinas que no corresponde al nuevo Código Electoral.

Ahora, el pleito queda en manos de la jueza De León Ríos y a vista de mañana.

Colgando como una espada sobre la petición de Irizarry Méndez está la realidad inescapable de que lo que los tribunales decidan sobre la validez de ese tipo de voto puede aplicarse también a cualquier otra carrera en la que se haya registrado aunque sea uno de esos “votos mixtos”. Esas carreras se han contado y escrutado bajo el acuerdo de la CEE de que ese voto se consideraría válido, por lo que una decisión contraria en el caso de Irizarry Méndez abre la puerta a que otros candidatos busquen revisión de las papeletas en sus carreras.

“Resulta pertinente enfatizar que mientras este Tribunal no resuelva la controversia planteada, existe la posibilidad de que surjan nuevas imputaciones sobre la legalidad de los llamados votos mixtos que no cumplen con la definición del Código”, admitió la candidata en su solicitud al Supremo.

El escrito también plantea que la controversia es distinta a la de 2004 porque en aquella ocasión se trataba de interés de los electores de mantener inscrito a un partido mientras se votaba por los candidatos de otro, mientras que en la papeleta municipal los votos no se cuentan para la inscripción de partidos.

“El Código no faculta ni a la Comisión ni a los Comisionados Electorales a variar la definición de lo que es un ‘voto mixto’ ni tiene discreción para interpretar la validez de dichas papeletas en contravención con lo dispuesto en el Código. Mucho menos se puede ‘acordar’ u ordenar programar las máquinas electrónicas de conteo o escrutinio para que adjudiquen votos que no cumplan con las especificaciones del Código Electoral 2020”, argumentó Irizarry Méndez.

Por otro lado, el PPD sometió ayer a los tribunales otra controversia que, en el fondo, tiene que ver con cómo funcionan las máquinas de escrutinio. El comisionado electoral de la colectividad, Gerardo Cruz Maldonado, planteó que Rosado Colomer erró cuando ordenó realizar un recuento “en toda la papeleta legislativa a nivel Isla”, lo cual fue contrario a la posición que asumieron los comisionados del PPD y del Movimiento Victoria Ciudadana que sostuvieron que el recuento debía ser solo en las posiciones en las que, como establece el Código Electoral, hay una diferencia de menos de 100 votos o del 0.5%.

Los comisionados del PNP, de Proyecto Dignidad y del PIP asumieron una posición en contra porque, al pasar la papeleta legislativa por las máquinas como parte del recuento, la máquina comoquiera va a volver a contar todas las marcas emitidas para todas las carreras, y no solo las emitidas en las carreras que cumplen con los criterios para recuento.

Cruz Maldonado pidió al tribunal que ordene que el recuento legislativo se limite a las carreras de la posición 11 y 12 del Senado por Acumulación, los Distritos Representativos Núm. 18 y 31 a la Cámara de Representantes, la segunda y tercera posición del Distrito Senatorial de Arecibo y los Distritos Senatoriales de Ponce y Humacao.

Periodista y abogado con 25 años de experiencia. Cofundador, o miembro de los equipos fundadores, de NotiCel, el Centro de Periodismo Investigativo, Red 96, Primera Hora y El Nuevo Día Interactivo.