La conclusión de la celebración de la misa católica el domingo fue acompañada por una protesta pacífica por parte de maestros católicos que exhortaron al arzobispo de San Juan, Roberto González Nieves, al diálogo.

Los manifestantes eran parte de los múltiples maestros de escuelas católicas que ganaron una demanda contra el líder religioso y la Arquidiócesis por la falta del pago de su retiro, un beneficio que se le había prometido años atrás y que fue eliminado por el monseñor.

Al finalizar la misa, los ujieres de la catedral informaron a los abogados de los manifestantes que permitirían a cinco maestros y a la prensa reunirse con el arzobispo. Luego que partió la tradicional procesión de San Juan Bautista, el clerigo se quedó en la iglesia y escuchó los reclamos de los maestros.

González reiteró los planteamientos hechos por la iglesia en el caso judicial, principalmente que el manejo irregular de los fondos del Fideicomiso de la Iglesia Católica precede su obispado y que la Iglesia en Puerto Rico no está organizada de tal manera que sea el quien responda por la totalidad de la iglesia.

'Yo no tengo la autoridad, no tengo la autoridad legal de hablar a nombre del… solo puedo hablar en mi nombre', sostuvo González al señalársele que el tribunal ha dicho lo contrario.

Los maestros exhortaron insistentemente al arzobispo a sentarse a dialogar con los maestros. Aunque González no hizo un compromiso definitivo a esos efectos, ni si cumpliría con las ordenes del tribunal para comenzar el desembolso de las pensiones adeudadas, se mostró abierto a la posibildad de continuar el diálogo.

Más de una decena de maestros ascendieron la calle Caleta, portando pancartas alusivas a sus reclamos y cantando himnos religiosos. Su reclamo: compeler al arzobispo a entrar en un dialogo con los maestros para dirimir la controversia sobre sus pensiones.

El asunto se remonta al 2016, cuando la Arquidiócesis de San Juan comunicó a los maestros de las escuelas católicas que cesarían los pagos de pensiones y beneficios a sus integrantes, debido a que el sistema de retiro quedó insolvente. Como resultado, cientos de maestros de 13 colegios católicos se unieron en una demanda para reclamar a la iglesia a pagar.

Sin embargo, tras dos sentencias ordenando la continuación del pago de las pensiones hasta tanto se tramite el caso en sus meritos, la iglesia aún no ha retomado el pago de estas obligaciones, que suma a poco más de $4 millones. Según explicó uno de los representantes legales de los maestros, Germán Brau, la Iglesia ha asumido una postura de no hacer cumplir las directrices del tribunal, por lo que anticipó que el rumbo que han emprendido podría resultar en una provocación hacia las autoridades civiles.

'Nosotros entendemos que la iglesia católica, de los asuntos que se adjudicó y se clarificó, es que la iglesia, la totalidad de la iglesia en Puerto Rico responde por esta deuda. Todas las diócesis y todas las parroquias y todas las instituciones adscritas a la iglesia católica en Puerto Rico son responsables por esta deuda', declaró Brau.

Entretanto, los maestros se ubicaron en las escalinatas de la Catedral de San Juan Bautista con pancartas en mano, mientras el arzobispo celebraba la misa. Una de las manifestantes, Yali Williams, jubilada de la Academia Perpetuo Socorro, contó a este medio que ha logrado subsistir con la pensión de su difunto esposo, pues desde el 2016 no ha podido cobrar su pensión, lo que la ha alejado de su deseo de dedicarse a sus nietos.

Preguntada por este medio sobre las acciones del arzobispo en no ordenar el cumplimiento inmediato de las ordenes del tribunal, Williams puso su fe en un poder mayor al que, tanto ella como el arzobispo, responden. 'Yo no soy quien para juzgar, Papá Dios se encarga. Pero yo entiendo que hay una justicia, por lo mismo que tengo fe. Y tengo fe en un Dios muy grande. Él se ocupará, ahora yo tengo la fe en que la justicia se llevara a cabo', expresó Williams.

Al lado de Williams se sentaba Carlos Ruiz, tambien maestro de la Academia Perpetuo Socorro y en delicada condición de salud. Ruiz expresó su orgullo en haber educado a seis estudiantes que pasaron a convertirse en medicos y que hoy le expresan su apoyo ante la situación en la que se encuentra.

'Estaba recibiendo mi pensión de donde me tuve que retirar, y ustedes saben el resto y aquí estamos tratando de buscar justicia en algún sitio', sostuvo Ruiz.