Buscan regar la semilla de la solidaridad
Dice el escritor uruguayo Eduardo Galeano que 'la caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respeto mutuo'. A la fundadora del Premio a la Solidaridad, Lourdes Miranda, le ha costado un poco de trabajo hacer notar esa diferencia, que solidaridad no es caridad, pero desde que comenzó su gestión por reconocer a las organizaciones sin fines de lucro que con sus acciones dan sentido al significado de la palabra, la comprensión se ha extendido.
'Hace 10 años, solidaridad no se oía, era un término obsoleto que no circulaba en el lenguaje. Al principio, los primeros años, se confundía. Las personas no sabían de qué estábamos hablando. Solidaridad no es que se hace solo cuando hay un huracán, no es nada que surge estrictamente para los puertorriqueños, sino sentir por el otro dondequiera que esté, no importa en las circunstancias que esté', explica Miranda.
Eso, a veces sin saberlo, muchas personas y grupos lo han puesto en práctica sin reservas, tendiendo puentes de entendimiento entre los individuos y uniendo gentes con un mismo propósito de bien común.
En 10 años que se ha otorgado el premio, varias organizaciones con distintos fines han sido reconocidas, desde Comerciantes Unidos por el Desarrollo Comunitario de Camuy, hasta Iniciativa Comunitaria de Investigación, el Corredor Ecológico del Noreste y el Grupo de las Ocho Comunidades Aledañas al Caño Martín Peña (G-8).
La diversidad demuestra las posibilidades de la solidaridad.
Por eso, cada año, son decenas las organizaciones las que aspiran al premio que ha otorgado sobe $125,000 desde su establecimiento en el 2002 y que este año otorgará $7,000 a la ganadora; $5,000 por el premio a la Solidaridad en Educación Santander y dos menciones honoríficas de $1,500 cada una.
Este viernes 29 de junio es el último día en que las organizaciones sin fines de lucro o grupos de acción ciudadana pueden nominarse para recibir el premio, a través del portal www.redsolidaridad.org.
El premio es como un incentivo para seguir esparciendo la semilla de la solidaridad, explica Miranda. Las organizaciones que participan se hacen más conscientes, dan a conocer su trabajo y pueden ampliar su alcance. 'Existen personas e individuos y organizaciones que tienen una gran conciencia solidaria, pero hay que seguir trabajando. Es un ideal que es difícil de alcanzar, pero el puertorriqueño es solidario, si se crea esa cultura, el puertorriqueño responde'.