Valencia.- El cantante, compositor y guitarrista estadounidense George Benson ha dado hoy al público valenciano una lección de elegancia en un concierto en el que ha cantado, ha bailado y ha demostrado que es uno de los mejores músicos de jazz.

Con una puesta en escena muy simple, que dejaba todo el protagonismo a la música, Benson ha dado un recital de casi dos horas en los jardines de Viveros de Valencia, donde ha hecho un repaso por lo mejor de su extensa carrera que comenzó cantando en 'nightclubs' cuando tan solo tenía 8 años en su Pittsbourg natal.

A los diez años grabó su primer sencillo 'It should have been me' y desde entonces ha sacado al mercado decenas de álbumes con música que abarca estilos como el swing, el quiet storm, el bop y la fusión de jazz con blues y soul.

Toda esa experiencia en el mundo de la música se demuestra en su directo, en el que Benson se muestra cómodo, tanto cuando toca su inseparable guitarra como cuando la deja a un lado para cantar y atreverse incluso con unos pasos de un baile supuestamente seductor.

Benson ha mantenido ese aire de galán antiguo durante todo el concierto, pero sobre todo ha salido a la luz con sus temas más románticos, como 'Turn your love around', 'In your eyes' o 'Kisses in the moonlight', acompañados por guiños al público, especialmente a las mujeres.

No en vano, ha asegurado que España 'es el país del amor' y ha dedicado a todas las mujeres que llenaban Viveros uno de sus temas más aclamados: 'Nothing's gonna change my love for you' (del álbum de 1984 '20/20'), la primera canción que ha hecho sacar los mecheros y su versión del siglo XXI, los teléfonos móviles.

Pero el concierto ha comenzado más calmado, con temas instrumentales de puro jazz como 'Breezin', una de las canciones de su repertorio más elegantes y frescas en las que Benson se puede lucir como lo que es: uno de los mejores guitarristas de jazz.

Benson ha jugueteado con su guitarra hasta sacarle melodías agitadas y que han hecho moverse al público, varios centenares de personas de mediana edad que hoy se han puesto sus mejores galas para ver a uno de sus ídolos de juventud.

Acompañado de cinco músicos, el cantante y guitarrista ha continuado el concierto con canciones como 'At the Mambo Inn', 'Love x Love', 'Give me the night' o 'Nature Boy', pasando sin pausa del jazz más tradicional a otros temas que desprendían un aire de blues e incluso de funky.

Aunque la edad no perdona (tiene 69 años) y en algunos momentos se le ha visto algo cansado, lo cierto es que sus pies se movían al ritmo de la música, sobre todo al principio y al final del concierto, cuando se ha colgado la guitarra y ha hecho lo que mejor sabe hacer.

El repertorio ha mezclado sus canciones de siempre con los temas de su última etapa, aunque de su último trabajo discográfico 'The guitar man', apenas se ha podido escuchar una canción.

Se trata de un tema muy especial, una versión instrumental y adaptada al jazz de 'The lady in my life', de Michael Jackson, con el que ha rendido homenaje al fallecido rey del pop.

Con todos esos temas, Benson ha ofrecido hoy un concierto clásico, una actuación de las de antes, sin sorpresas, que ha acabado como el público pedía, con una de las canciones más conocidas del artista.

Los primeros compases de 'On Broadway'( del álbum de 1978 'Weekend in LA') han desatado los gritos del público, que no ha dudado en ponerse en pie para bailar al ritmo de la última canción del concierto, la más coreada y también la más esperada.

El concierto de hoy en Viveros, que forma parte de la programación musical de la Feria de Julio de Valencia, ha sido el primero de su gira por España, que a partir de ahora lo llevará a Alicante (13 de julio), Marbella (14 de julio) y Palafrugell (15 de julio).